Cristiano Ronaldo encajó los dos goles del Real Madrid. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 06:19 pm
En un partido lento y soso, el Real Madrid español venció este miércoles como visitante por 2-0 al pálido Malmoe sueco, en el Swedbank Stadion, en la segunda fecha de la Liga de Campeones del fútbol europeo, con par de goles del crack lusitano Cristiano Ronaldo (CR7).
Realmente, fue un monólogo del cuadro blanco, que empleó un diseño de 4-3-3, con Casemiro haciendo el «trabajo sucio», protegido por Toni Kroos y Mateo Kovacic. Los alumnos de Rafa Benítez controlaron el juego sin contratiempos, pues el local no le preocupó mostrarse tal cual es: escurridizo y apostando al contragolpe… que nunca consiguió.
El primer gol del Madrid llegó en el minuto 29, mediante una contra excepcional de Isco, quien vio solo a Ronaldo, que definió cruzado ante el portero Wiland.
En el tiempo complementario, Malmoe mejoró algo con las subidas del peruano Yotún por la banda. Pero luego, el sudamericano no pudo «hacerse el sueco» en una falta violenta y fue expulsado por doble amarilla. Si hasta ahí el Madrid apenas tuvo exigencias del rival, en lo adelante el partido cayó mucho más en un real «abuso merengue». El Malmoe pudo acabar goleado, pero CR7 no pudo salir airoso contra Wiland en dos ocasiones claras de gol.
Pero como reza el viejo adagio, «a la tercera, va la vencida». Y en un pase de Vázquez, en el minuto 90, Cristiano marcó su segundo gol, su número 323 como jugador del Madrid, igualando a Raúl. Con esas dos dianas, cortó una racha de tres partidos sin marcar, además de superar a Raúl como máximo goleador del Madrid en la historia de la Champions. El «Ángel de Madrid» anotó 66 tantos en 130 partidos, mientras que el crack luso suma ya 67 en 65 encuentros. Curiosamente, ambos coincidieron una temporada (2009-10) como madridistas y anotaron en el primer choque europeo de esa campaña ante el Zúrich.
En ese mismo grupo A, el PSG francés goleó 3-0 al Shakhtar Donetsk ucraniano, como visitante en el nuevo estadio de Lviv. Las dianas galas fueron de Aurier (minuto 7), David Luiz (23’) y un autogol de Srna (90’).
Mientras, en la llave B, el Manchester United derrotó a Wolfsburgo alemán por 2-1, como local en Old Trafford. Caligiuri adelantó temprano a los germanos con su gol en el minuto 4, pero Mata se convirtió en el jugador que levantó al público en el «teatro de los sueños». El extremo español provocó una mano y ejecutó el penalti con calidad en el minuto 34’. Luego, hizo la asistencia más bella de la fecha. De tacón, desde la frontal del área, asistió a Smalling, quien puso el 2-1 favorable en el 53’.
Por ese mismo segmento, el PSV sucumbió en Moscú ante el CSKA, tras una horrible primera mitad en la que encajó tres tantos, dos de Seydou Doumbia quien incluso falló un penalti. A la desesperada, el equipo holandés se quedó a las puertas del empate (3-2). Sus dos disparos fueron obra de Maxime Lestienne.
Pero la gran decepción de la jornada se presentó en el grupo C, en el estadio Vicente Calderón, donde el Atlético de Madrid sufrió una remontada en contra y cedió 1-2 ante el Benfica portugués. La primera titularidad del talentoso volante argentino Ángel Correa, la celebraba con gol en el minuto 23. Pero un zurdazo de Gaitán empató el partido sin finalizar el primer acto y un error defensivo y la mala salida de Oblak permitió a Gonçalo Guedes dar el triunfo al Benfica, en el minuto 51.
En ese mismo grupo C, en un duelo con tres goles en propia puerta-récord de la competición-, el Galatasaray no pasó del empate en casa del Astana (2-2) y permite al Atlético ser segundo.
Y en el grupo D, en el Juventus Stadium, el cuadro local derrotó 2-0 al Sevilla, con tantos de Álvaro Morata, de cabeza, y de Simone Zaza. Esta llave se aprieta con el triunfo por 2-1 en el último suspiro del Manchester City, en el Borussia Park, donde funge como local el Mönchengladbach alemán, gracias al tanto de penalti del «Kun» Agüero, que rompió el empate 1-1 transitorio y sentenció la remontada. Lars Stindl puso delante en el pizarrón al elenco de casa, en el 54’. Pero Nicolás Otamendi había logrado la paridad en el 65’.