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Harvey Schiller, presidente de la IBAF. Foto: Juan Moreno «Cuba lleva a los Juegos Olímpicos a sus mejores jugadores; ya es hora de que todos los países hagan otro tanto», declaró este lunes Harvey Schiller, presidente de la Federación Internacional de Béisbol (IBAF, por sus siglas en inglés), a su llegada a La Habana.
De origen estadounidense, el federativo añadió, sonriente: «he venido para reunirme con los muchos amigos que me ha dado el deporte de ustedes; a debatir sobre la Olimpiada de Beijing, en agosto próximo, y sobre devolver a los peloteros al programa cuatrienal. Pero lo más importante es darle las gracias a este país por todo el apoyo que le ha dado al béisbol.
—¿Qué haría IBAF para que regresen las bolas y los strikes al calendario de los Juegos Olímpicos?
—Debo aclarar que sentí una gran desilusión al saber que esta modalidad se retiraba del programa, y todavía no están muy claras las razones que llevaron a esa decisión. Estamos enfocados en fortalecer nuestra organización, y para ello hay que diversificar la práctica de la disciplina a nivel mundial.
De acuerdo con el visitante, uno de los puntos de convergencia en todos los ámbitos del béisbol es la identificación con la política antidoping que se lleva a cabo, para garantizar que todos hagan un juego limpio.
«Estamos haciendo muchos amigos dentro del movimiento olímpico, y pienso que hay enormes posibilidades de que esta disciplina reingrese en la edición de 2016, porque desgraciadamente no estará en Londres 2012».
—¿Qué podría hacer, en concreto, el Comité Olímpico Internacional (COI), para rescatar la pelota?
—Hay siete modalidades que tratan de regresar al programa, eso se va a discutir pronto, y creo que es el béisbol el que más probabilidades tiene.
—¿Cómo marcha la organización del II Clásico Mundial?
—Nos reunimos en Nueva York, hace pocos días, con los representantes de la MLB (Major League Baseball, las Grandes Ligas norteamericanas), y todo anda sobre ruedas. Los grupos preliminares se disputarán en las ciudades de Tokio (Japón), San Juan (Puerto Rico), Toronto (Canadá) y México, donde competirán los cubanos.
Schiller insistió más tarde en agradecer el espaldarazo brindado por los cubanos a la organización de la Copa Mundial de 2009, con preliminares en varias ciudades de Europa, y una gran final reservada a Roma.
En horas de la noche, Schiller presenció —en el estadio Latinoamericano— el tercer triunfo de la preselección Cuba, un nocao de 11-0, sobre los peloteros norteamericanos de la Universidad de Santa Bárbara.
Hoy los 32 criollos van de visita a sus hogares, y el domingo próximo, 29 de ellos saldrán hacia el torneo de Haarlem, en Holanda.
