CIEGO DE ÁVILA.— La filial de la Cinemateca de Cuba en Ciego de Ávila exhibe un ciclo de homenaje a Alain Delon, una de las figuras más importantes de la cinematografía francesa, que marcó al público cubano durante tres décadas, por su estilo de actuación y atractivo físico.
La muestra abarca las principales cintas que le dieron el reconocimiento mundial en la década de 1960 como A pleno sol, del director René Clement; Los aventureros, de Robert Enrico; y la célebre El samurái que lo lanzó como una estrella internacional, dirigido por Jean-Pierre Melville.
Otro de los largometrajes es Diabólicamente tuya —exhibido en su época en Cuba bajo el título de Satánicamente tuya—, en la que Delon, poseedor de la Legión de Honor y un Premio César, interpreta a un joven que ha perdido la memoria después de un accidente del tránsito y se descubre internado en una mansión al cuidado de una bella mujer, que dice ser su esposa.
Nacido el 8 de noviembre de 1935, resultó descubierto en Cannes en 1956. En 1967 apareció en El samurái, donde desarrolló un personaje frío, lacónico y dispuesto a todo, que reiteró al punto de autolimitar su carrera actoral, según los críticos.
Sin embargo, quizá como una respuesta a las acusaciones de actor encasillado, Alain Delon demostró sus dotes actorales en Mr. Klein, de Joseph Losey; y sobre todo en Nuestra historia, del realizador Bertand Biller.