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Esos jóvenes desarrollan su obra artística junto con su deber como educadores, como les pidió FidelPoco a poco los miembros de la Brigada de Instructores de Arte José Martí han ganado credibilidad con su trabajo y lo seguirán haciendo. Los resultados son una realidad y el mayor logro está en la sonrisa de un padre agradecido por lo que su hijo aprendió, y en la satisfacción del estudiante con lo que le han enseñado, afirmó ayer Carmen Rosa Báez, funcionaria del Consejo de Estado, en la inauguración del Primer Festival Nacional de la Brigada de Instructores de Arte José Martí.
Carmen Rosa manifestó a la prensa que está por verse todavía lo mucho que puede hacer este ejército de jóvenes brigadistas, a quienes Fidel les esclareció, el 20 de octubre de 2004, en la plaza Ernesto Che Guevara, en Santa Clara, que no tenían que plantearse una contradicción entre la función de artistas y la de educar, pues pueden desarrollar su obra artística y ser capaces de cumplir con su deber como educadores.
Al hacer uso de la palabra en la apertura del Festival, que tuvo lugar en la Casa Museo Simón Bolívar, de La Habana Vieja, Luis Morlote, presidente de la Asociación Hermanos Saíz, expresó que la Brigada es «un eslabón esencial de la vida cultural de nuestro pueblo», que junto a la UNEAC y la Asociación Hermanos Saíz tienen la responsabilidad de trabajar en la construcción de una sociedad mejor.
Carlos Valenciaga, miembro del Consejo de Estado; Rolando Yero, integrante del Buró Nacional de la UJC; Lisset Ametller, presidenta de la Brigada de Instructores de Arte; y Eusebio Leal Spengler, historiador de la Ciudad, asistieron al comienzo del Festival, que incluyó, entre otras actividades, la inauguración de una exposición de pintura en la Casa Museo Simón Bolívar.
El Festival, que concluye el 19 de octubre, está dedicado al aniversario 40 de la caída en combate del Che Guevara y al Día de la Cultura Cubana.
