Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Noche de fiero chubasco/ por la enlutada llanura, /y de encendidas chipolas / que el rancho del peón alumbran. / Adentro suena el capacho, / afuera bate la lluvia; / vena en corazón de cedro / el bordón mana ternura; / no lejos asoma el río / pecho de sabana sucia; / más allá coros errantes, / ventarrón de negra furia, /y mientras teje el joropo / bandoleras amarguras / el rayo a la palma sola le tira señeras puntas.

Ningún otro poema más atinado para describir el llano venezolano que Florentino el que cantó con el Diablo, escrito por el abogado, educador y poeta Alberto Arvelo Torrealba. Y es justamente en esta obra célebre en la que se inspiró el ya desaparecido maestro Antonio Estévez para componer su inmortal Cantata criolla..., sinfonía coral con la que cerrará la gala de apertura del Festival Internacional Cubadisco 2007, que tendrá lugar mañana, a las 5:00 p.m., en el Teatro Amadeo Roldán, a partir del hecho de que la Patria de Bolívar es la nación invitada de honor de esta undécima edición.

Y claro, como aseguró a Juventud Rebelde el maestro José Antonio Naranjo Zerpa, actual presidente de la Fundación Orquesta Filarmónica Nacional, «la ocasión amerita que actúe en Cuba, y en un festival de esta envergadura, una autorizada delegación de artistas de mi país. Y es que todos reconocemos la importancia de este intercambio cultural, en tiempos del ALBA.

«Esta vez hemos queremos invitarlos a que realicen un viaje imaginario por nuestra historia a través de la música. Y para el espectáculo de apertura hemos seleccionado obras de tres Premios Nacionales de Música de mi tierra: los compositores Antonio Estévez, Federico Ruiz y Antonio Lauro», adelantó el reconocido flautista caraqueño.

A este concierto, dirigido por el maestro César Iván Lara, como a los otros que se desarrollarán en el Teatro Amadeo Roldán durante el Cubadisco, tendrán el derecho de asistir los asociados a la Orquesta Sinfónica Nacional. Así el Concierto No. 1 para guitarra y orquesta, de Lauro, con Luis Quintero como solista; el Concierto para trompeta y orquesta, de Ruiz, con el joven Francisco Flores al frente; y la Cantata criolla. Florentino el que cantó con el diablo, de Estévez, con el tenor Idwer Álvarez y el barítono William Alvarado, como invitados, serán las piezas que defenderá la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), bajo la batuta del también venezolano César Iván Lara.

Luis Quintero abrirá la gala. Del intérprete, compositor y arreglista Luis Quintero habló a JR el muy joven César Iván, considerado como un «hacedor de orquestas». «Quintero es uno de los más emblemáticos exponentes de la guitarra venezolana e internacional y ha actuado en diveros escenarios del mundo. Este destacado instrumentista, egresado de The Julliard School of Music, de Nueva York, reconoce que una de sus principales influencias ha sido precisamente Antonio Lauro, de quien interpretará su más famoso concierto».

Asimismo, con solo 26 años, pero con currículo envidiable, Francisco Flores, más conocido como Pacho Flores, clasifica entre los más grandes trompetistas de su generación, después de haber ganado en concursos internacionales de talla extra como el Maurice André de París, el Philip Jones de Guebwiller (ambos en Francia), el Città di Porcia de Italia, así como en el de Hungría; premios que le abrieron las puertas de festivales como el Spanish Brass (España), el Epsival Brass Week (Francia) y el Ciclo Internacional de Conciertos en la Ciudad de Navajas (España), así como de espacios renombrados al estilo del Carnegie Hall, de Nueva York.

Pacho Flores clasifica entre los trompetistas más sobresalientes del mundo. «Lo que más me atrae de esta obra es su fuerte carácter latinoamericano», dice Pacho, que actualmente forma parte de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar y quien se estrenará con ella en Cuba, y explica: «En el primer movimiento se le hace un homenaje al tango; en el segundo al bolero y en el tercero aparecen las danzas zulianas y los tambores. Montarla no ha sido tan arduo, pero he tenido que analizarla una y otra vez, porque lo que más me preocupa no es la destreza que pueda mostrar en la ejecución, sino la interpretación.

«Estaba ansioso por estar acá, por encontrarme con los trompetistas cubanos que tanta reputación tienen en el mundo», asegura Flores, quien la próxima semana se presentará junto a la Sinfónica de San Petersburgo para luego, antes de ser aplaudido en Estados Unidos y Japón, emprender una gira por su nación guiado nuevamente por Lara.

En unos pocos años, Lara ha logrado ubicar en un lugar cimero dentro del panorama musical venezolano a las diferentes orquestas que ha dirigido. De su incansable labor en defensa de la música y la identidad nacional conocen colectivos como la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar del Táchira, la Sinfónica de Falcón y su homóloga de Mérida, pero también otras de Colombia, Nicaragua, México y Corea del Sur. Sin embargo, esta es la primera vez que actúa en la Isla, y «espero que no sea la última.

«Para nosotros es un honor y un placer inaugurar el Festival con parte de los más representativo de nuestra música. Escogimos para ello un repertorio que comprende el período nacionalista. Estrenaremos aquí, por ejemplo, el concierto para trompeta concebido por el maestro Federico Ruiz, compositor de fama internacional. Y para el final hemos dejado una obra de gran envergadura donde se sintetizan muchos de los elementos folclóricos que nos identifican. En esta pieza se describe magistralmente el entorno donde se desarrolla la acción entre Florentino (un llanero) y el Diablo, que lo reta.

«Cantata criolla..., que obtuvo el Premio Anual de Sinfónicas, está considerada como la obra musical venezolana más importante del siglo XX».

—¿Complejo el montaje?

—Es en verdad una obra compleja. Y es que si es difícil traducir la música popular a la parte académica, más espinoso es interpretar lo que quedó escrito, sin que pierda la apostura de lo clásico ni su sabor.folcrórico Hay obras que no se deben interpretar exactamente como están compuestas, y este es el caso de Cantata... Por lo demás, ha sido fenomenal trabajar con estos talentosos músicos cubanos, algo que yo añoraba desde hacía mucho tiempo».

El concertino Ariel Sarduy. Con Lara coincide el concertino de la OSN, el violinista Ariel Rafael Sarduy Méndez, quien a pesar de admitir que Cantata criolla... es una pieza compleja, «la hemos disfrutado sobremanera, porque está magníficamente orquestada. Posee un ritmo intrincado, al tiempo que refleja un alto nivel orquestal. Suena fenomenal. Estamos convencidos de que será un excelente estreno para Cuba».

Para Idwer Álvarez la Cantata criolla... «es casi mi carrera. He cultivado la música sacra, la sinfónico coral, la de cámara, la contemporánea, la ópera..., sin embargo, no hay una pieza con la que me identifique tanto como esa. He representado a Florentino varias veces (esta sería la 86), siempre me llega con una energía nueva», confiesa este tenor, a quien le encantaría repetir su actuación en octubre próximo junto a su actual maestra, la cubana Lucy Ferrero.

Por su parte, el barítono William Alvarado cumple este año exactamente tres décadas de haber «vestido» al Diablo, «aunque Idwer me lleva 15 representaciones de ventaja (sonríe). Tuve el honor de haber montado este personaje con el maestro Estévez, y es un recuerdo que guardo como un gran tesoro».

«Pero estas no serán las únicas presentaciones, aseguró a JR Antonio Naranjo. Puedo afirmar que serán muy atractivas las actuaciones de diversos representantes de nuestra música tradicional en el Pabellón Cuba, o la de otros artistas en en el Jardín de la Música del Instituto Cubano de la Música, en el I Concierto de la Canción Necesaria de la Tribuna Antiimperialista y en Casa de las Américas. Espero que para los cubanos y los venezolanos este sea un festival inolvidable».