Los pioneros agramontinos desfilaron entusiastas en saludo al 1ro de mayo. Autor: Del Autor Publicado: 26/04/2025 | 03:03 pm
Camagüey.— Sí, no hubo ni pasividad ni pereza. No lo digo yo, sino la multiplicidad de colores, sonrisas, bailes, ... y un familión ataviado de responsabilidades para con sus niños y niñas.
El Casino Campestre, parque urbano más grande de Cuba, —con un área de 131 mil 500 metros cuadrados—, ataviado con su belleza natural de pulmón verde, y con la de los pequeñines, catapultó a un desfile en tradición, —único de su tipo en Cuba—, que multiplicó sueños, proyectos, y el futuro para quienes se empoderaron, y se sintieron, a pesar de su edad, galenos y galenas, constructores, maestros y maestras, campesinos, deportistas, ....
El desfile pioneril numero 21, en la ciudad legendaria agramontina, tuvo sus réplicas en todos los municipos de la extensa llanura, y en escuelas rurales y distantes.
Esta marcha de sueños y empeños, como una tradición genuina de saberes y algarabía, «despide» a un abril siempre joven, y desde su epicentro abraza y engalana al mayo obrero, porque sin duda impulsa con su ejemplo, optimismo y sonrisas la fiesta cubanísima por el Primero de Mayo.
La marcha de los príncipes enanos en la tierra de los tinajones, es identidad que enorgullece a los agramontinos y agramontinas, es un aula de puro sol para la formación de valores en los pinos nuevos, en la que deslumbran la inclusión y el humanismo, y un retrato muy definido, en alta resolución, de lo que esta Isla, a pesar de carencias todo tipo, puede lograr desde la creatividad, la resiliencia, la unidad y la resistencia.
Paraezcámonos todos y todas a los niños y niñas del Primero de Mayo pioneril agramontino, por su alegría y por su rumba que le sumba, y contagia.