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«Los Cinco han consagrado su libertad por la nuestra. Por eso aprovecho la ocasión para visibilizar, no solamente la lucha por los derechos sexuales en el mundo, sino también para seguir insistiendo en que EE.UU. se siente a dialogar con Cuba para que nos devuelvan a Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René».
Estas fueron las palabras iniciales de la Máster Mariela Castro Espín, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), al inaugurar el Taller Sexualidad y derechos humanos que se celebró este lunes en La Habana, en la sede de la institución, a propósito del Día Mundial de los Derechos Humanos.
Luego de reiterar la exigencia de libertad inmediata para los luchadores antiterroristas, Castro Espín señaló que la política cubana de educación sexual está basada en paradigmas emancipatorios que ponderan los valores humanitarios de solidaridad, igualdad y equidad social.
En una conferencia sobre los derechos sexuales en Cuba, con la participación de estudiantes universitarios, y en la que realizó un profundo recorrido por las cinco décadas de educación sexual en la Isla, dijo que hoy la sexualidad se caracteriza por su visión integral, con enfoque de género y diversidad, y el respeto a la dignidad plena de cada ser humano.
«En nuestro país se han dado pasos muy importantes para promover el respeto a la libre y responsable orientación sexual e identidad de género, y el Cenesex es muestra de ello, con la articulación de redes sociales para formar activistas por los derechos sexuales; sin embargo, aún no son suficientes», agregó.
En su intervención, destacó la trascendencia del papel de la FMC como una fuerza impulsora del desarrollo social en el país desde los años 60 del siglo pasado, así como la creación en 1996 del Programa Nacional de Educación Sexual en la escuela con enfoque de género: Por una educación sexual responsable y feliz, que hoy se extiende a toda la nación.
