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El DÁTIL, Bayamo, Granma.— Pobladores de esta localidad, donde vivió durante años Máximo Gómez Báez, recordaron en nombre del pueblo de Cuba al Generalísimo del Ejército Libertador, de quien se celebró ayer el aniversario 175 de su natalicio.
La concentración popular que homenajeó al insigne cubano-dominicano tuvo lugar en los alrededores del monumento erigido a la memoria del patriota en esta localidad, en la que fue reclutado en 1868 por José Joaquín Palma para formar parte de las tropas independentistas guiadas por Carlos Manuel de Céspedes.
Raudel Reyes García, presidente de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media en Bayamo, enalteció la dimensión humana del héroe y se refirió a la influencia revolucionaria que tuvo en su hijo, Panchito Gómez Toro, caído en combate junto a Antonio Maceo y actualmente figura emblemática de esa organización estudiantil.
Por su parte, Federico Hernández, primer secretario del Partido en Bayamo, evocó la etapa en que Gómez vivió en El Dátil junto a su madre y tres hermanas desde 1865 hasta 1868, año en el que se convirtió en el oficial mambí cuya inteligencia, valentía y capacidad militar lo llevaron pronto al generalato.
El dirigente expuso que el prócer —nacido en Baní, República Dominicana, el 18 de noviembre de 1836 y fallecido en La Habana el 17 de junio de 1905—, fue un maestro de guerreros que enseñó a emplear el machete a los insurgentes cubanos y siempre dio ejemplo personal en los campos de batalla.
La rememoración incluyó actuaciones del Coro Profesional de Bayamo, la solista Daniuska García y bailarinas de la Escuela Profesional de Arte Manuel Muñoz.
Integrantes destacados de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, estudiantes, trabajadores y dirigentes políticos y gubernamentales, encabezados por la primera secretaria del Partido en Granma, Sonia Virgen Pérez, asistieron al homenaje.
