SANTA CLARA, Villa Clara.— El camino para hacerse de un par espejuelos se ha hecho más expedito en Villa Clara en momentos en que existe mayor disponibilidad de recursos para prestar ese servicio.
Esta experiencia logra agilizar un trámite que era trabajoso y lento por causas diversas, con el consiguiente impacto negativo en la población.
Ahora se puede acceder con mayor facilidad a las prestaciones de las ópticas en los 13 municipios de la provincia como resultado del proyecto Una comunidad más saludable. Este consiste en acercar lo más posible a la población los disímiles servicios de salud.
Luego que los necesitados de espejuelos cuentan con la graduación requerida de la vista, previa coordinación con la dirección de las ópticas, personal de estas acude a los centros de trabajo u otras instituciones que lo solicitan.
Allí los clientes tienen la posibilidad de seleccionar la armadura y de inmediato se les hace la orden para que solo tengan que pasar después por la óptica a recoger sus lentes.
En el caso de localidades rurales, participan además optometristas, que les gradúan la vista a los necesitados.
Este proyecto se ha concretado ya en distintos municipios, en escuelas y centros de trabajo.
En opinión de Jorge Pino Rodríguez, director de la Empresa Provincial de Farmacia y Óptica, el servicio ha tenido buena aceptación en la población.
Destacó que en estos momentos cuentan con los recursos necesarios para garantizar la demanda de espejuelos, aunque reconoció que existen dificultades muy puntuales en graduaciones muy altas. Sin embargo, precisó, cuentan con alternativas para resolver esta situación.
Pino Rodríguez subrayó también que afrontan limitaciones con el tallado del cristal, debido a que el equipo destinado a ese trabajo lleva muchos años en explotación.