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La Empresa de la Pesca de Cienfuegos adaptó naves de su flota camaronera para destinarlas a la captura del tiburón, cotizado a altos precios en el mercado internacional Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 04:51 pm
CIENFUEGOS.— La Empresa de la Pesca de Cienfuegos adaptó naves de su flota camaronera para destinarlas a la captura del tiburón, cotizado a altos precios en el mercado internacional.
Gerardo López Duray, director de la entidad sureña, explicó que la decisión obedece a la necesaria expansión de los horizontes de pesca, en buena medida lastimados en el área escamera debido a la escasa presencia de varias especies en las últimas temporadas.
El directivo acotó que, por ejemplo, el año anterior la biajaiba y el pargo no corrieron, e incluso en lo que va de 2009 el plan de captura de la primera anda 13 toneladas por debajo de lo estimado para la etapa.
La flota camaronera sureña, la de más alto nivel de extracción del país, facilitó algunas de sus naves para —tras someterlas a una ligera adaptación—, pescar tiburones con palangres.
Dicha experiencia, inédita en estos lares, rinde sus primeros frutos, y en fecha reciente nuevas embarcaciones se hicieron a la mar con tal objeto, aseveró Gerardo.
La captura del escualo con palangre es habitual en varias partes del mundo, sobre todo en Europa y la zona del Mar Cantábrico. En otros sitios se prohíbe su uso desmedido.
El rey de los mares tiene disímiles empleos en la mesa y la medicina. Su carne se consume, fresca, salada o seca, como el bacalao. Las aletas son degustadas por comensales de todo el planeta: los chinos lo hacen desde hace siglos.
A partir de la década del 40 del pasado siglo comenzó a procurarse el aceite de su hígado, rico en vitamina A, tanto para el campo médico como para la cosmetología. Sobre las propiedades curativas de su cartílago existen muchos estudios. Con la piel son elaborados artículos de cuero y con sus dientes adornos y otros productos.
Aunque en el océano existen más de 350 especies de tiburones, su población mundial decreció bastante en los últimos años. Por ello, su captura aquí procede en niveles que no afectan su presencia en el ecosistema marino.
