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El reordenamiento, aplicado en las provincias de Pinar del Río, La Habana, Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila, no solo favorece el ahorro de petróleo, sino que permite un uso más racional del transporte
La reorganización de la transportación de carga ha sido aplicada ya en el 80 por ciento de los municipios de las provincias de Pinar del Río, La Habana, Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila. En el resto de los territorios del país se ejecuta la primera fase del proceso: el levantamiento del transporte y el balance de las cargas.
Lo anterior lo informó en un encuentro con la prensa Daisy Abreu Castaño, directora de Cargas del Ministerio de Transporte (MITRANS), quien añadió que aún no se ha puesto en práctica esta iniciativa en los municipios cabeceras de estas provincias porque al ser más grandes y complejos se precisa de un mayor estudio para después implementar la alternativa.
El reordenamiento, que se experimentó inicialmente en cuatro provincias de Cuba, no solo favorece el ahorro de petróleo, sino que permite un uso más racional del transporte y varias entidades trasladan sin morosidad sus mercancías, cuando antes no disponían de vehículos para estos fines.
El nuevo sistema propone agrupar vehículos, destinar a cada operación el carro adecuado según su tonelaje, combinar intereses para aprovechar al máximo los recorridos, y todo se conducirá desde un centro de Control de Operaciones que estará activado las 24 horas para afrontar las diversas situaciones que se presentan durante el día.
Desde la base concentradora se emplearán los carros más necesarios y desde allí se realizarán los diferentes traslados de manera planificada y se garantizará la gestión a todos los sectores.
La directiva sostuvo que este es un proceso que se va ajustando mientras avanza. «Muchas personas se resisten a entregar los equipos en un primer momento, pero luego hacen conciencia en el impacto que tiene la propuesta en nuestra economía», manifestó.
Por otra parte muchas entidades del sistema del Poder Popular, deprimidas en cuanto a medios de transporte, se han visto más aliviadas ya que pueden garantizar los proyectos previstos.
Esta centralización de la transportación de carga viene acompañada de otros programas que se ejecutan paralelamente en el país con el propósito de cerrar los resquicios por donde escapa el combustible y lograr así mayor eficiencia.
El proceso de remotorización de camiones y ómnibus escolares —según comentó Abreu Castaño— ha significado hasta el momento el ahorro de un 50 por ciento del combustible que antes se utilizaba.
«La remotorización no solo implica el cambio de motores; todos los sistemas del camión quedan restaurados al kilómetro cero», argumentó Raymer Díaz Estévez, director de Transporte Automotor en el MITRANS.
También se sustituyen camiones por camionetas en aquellos lugares donde no se necesita de esta gran capacidad para realizar labores administrativas, e implica una reducción del consumo energético.
