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El programa inversionista ha estado dirigido a enfrentar la sequía, mejorar el abasto de agua y dismininuir las pérdidas en su distribución
El país ha invertido más de 300 millones en los últimos años, tanto en moneda nacional como en divisa, para enfrentar la sequía, mejorar el abasto de agua y evitar que continúe perdiéndose el 60 por ciento de la que se bombea, informó este jueves en conferencia de prensa el ingeniero William Leyva Armesto, vicepresidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH).
Gracias a las obras acometidas con la ejecución de ese presupuesto y la infraestructura desarrollada en el país con el desarrollo de la voluntad hidráulica, Cuba se incluye entre las naciones que cumplen con las Metas del Milenio en materia de cobertura y saneamiento del agua.
El 75 por ciento de la población tiene acceso a este preciado líquido mediante conexión a las redes, y un 38 por ciento dispone de alcantarillas para sanear los residuales acuíferos.
Según informó el funcionario, se acometen labores de rehabilitación en las redes de distribución en Ciudad de La Habana, Camagüey, Las Tunas, Holguín y Santiago de Cuba; y se construyen acueductos en las 2 139 comunidades que hoy se abastecen mediante pipas.
Leyva Armesto significó que para mejorar el abasto de agua se trabaja en la rehabilitación de los acueductos de las cabeceras municipales y se reparan o sustituyen 25 conductoras de las cabeceras provinciales.
Entre las inversiones previstas en el país para enfrentar la sequía, el funcionario destacó la construcción de cuatro trasvases para trasladar agua desde las zonas más lluviosas a las menos favorecidas por las precipitaciones.
Aclaró que de estas cuatro obras actualmente solo se acomete el Trasvase Este-Oeste, el cual llevará agua de Holguín hasta Camagüey, y contará en su infraestructura con ocho presas, 280 kilómetros de canales y 54,2 kilómetros de túneles.
Precisó que los restantes trasvases se irán ejecutando paulatinamente, en la medida en que las posibilidades económicas de la nación lo permitan. Leyva explicó que el Alabama-Zaza-Camagüey, que trasvasará el preciado líquido del macizo montañoso Guamuhaya hasta Camagüey, contará con diez presas, 170 kilómetros de canales y casi dos kilómetros de túneles.
Señaló que el Toa-Guaso incluye en su inversión una presa y una derivadora, 24 kilómetros de canales y 16,1 de túneles; mientras el Sabanalamar-Pozo Azul contará con una micropresa y 1,5 kilómetros de túneles.
Entre las medidas que forman parte de la estrategia gubernamental para enfrentar la sequía se subrayó que de los 2 629 equipos que se deben sustituir por otros más eficientes en las estaciones de bombeo ya se han suplantado 1 066, lo que ha permitido un ahorro considerable de combustible.
