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La adecuada manipulación de los alimentos, especialmente en los meses de verano, contribuye a prevenir casos de intoxicación. Foto: Calixto N. Llanes SANTA CLARA.— La Unidad de Toxicología Territorial y del Laboratorio de Cirugía Experimental, inaugurados la víspera en el Instituto Superior de Ciencias Médicas Serafín Ruiz de Zárate, de esta ciudad, constituyen dos soportes de vital trascendencia para la atención a la población.
El primero de los mencionados posibilita un tratamiento más ágil y efectivo a los intoxicados —ya sea por alimentos, medicamentos, drogas y productos químicos, por solo citar algunos ejemplos—, imprescindible para lograr una evolución favorable del paciente.
Luego de conocer, por vía telefónica, los síntomas del paciente, el especialista en toxicología orienta el tratamiento inicial a seguir y con posterioridad el definitivo, de acuerdo con los resultados de los análisis de sangre, orina y de los jugos gástricos.
La unidad villaclareña cuenta con antídotos de primera línea para el tratamiento de las intoxicaciones que ocurren de manera accidental o intencional, y sigue la evolución de los pacientes, informó el doctor Máster en Toxicología Clínica, Leonardo Leiva Acebey, jefe del Departamento de esa especialidad en el Instituto de Ciencias Médicas.
Con esta institución se completa una trilogía de su tipo en el país, que integran el Centro Nacional de Toxicología, de Ciudad de La Habana, y el perteneciente a Santiago de Cuba. El de Villa Clara también brindará servicio a las provincias de Sancti Spíritus y Cienfuegos.
El Laboratorio de Cirugía Experimental está destinado al entrenamiento de los estudiantes de la especialidad de oftalmología, para lo cual utilizan ojos de animales, particularmente de cerdos.
También brindará adiestramiento a educandos de Medicina para el desarrollo de habilidades quirúrgicas, incluida la cirugía cardiovascular con el empleo de animales de laboratorio.
Según el doctor José Luis Molina Martínez, jefe del Laboratorio, profesionales de los hospitales de las provincias tienen posibilidades de realizar prácticas de transplantes de órganos, fundamentalmente renales.
