Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Eduardo Galeano debe ser teclero. Sin saberlo ha soplado a nuestra vida tantos abrazos... Aquí va uno. Como todos los suyos. Sencillo y eterno. Celebración de la voz humana

Tenían las manos atadas, o esposadas, y sin embargo los dedos danzaban, volaban, dibujaban palabras. Los presos estaban encapuchados; pero inclinándose alcanzaban a ver algo, alguito, por abajo. Aunque hablar estaba prohibido, ellos conversaban con las manos.

Pinio Ungerfeld me enseñó el alfabeto de los dedos, que en prisión aprendió sin profesor:

—Algunos teníamos mala letra —me dijo—. Otros eran unos artistas de la caligrafía.

La dictadura uruguaya quería que cada uno fuera nada más que uno, que cada uno fuera nadie: en cárceles y cuarteles, y en todo el país, la comunicación era delito.

Algunos presos pasaron más de diez años enterrados en solitarios calabozos del tamaño de un ataúd, sin escuchar más voces que el estrépito de las rejas o los pasos de las botas por los corredores. Fernández Huidobro y Mauricio Rosencof, condenados a esa soledad, se salvaron porque pudieron hablarse, con golpecitos, a través de la pared. Así se contaban sueños y recuerdos, amores y desamores; discutían, se abrazaban, se peleaban; compartían certezas y bellezas y también compartían dudas y culpas y preguntas de esas que no tienen respuesta.

Cuando es verdadera, cuando nace de la necesidad de decir, a la voz humana no hay quien la pare. Si le niegan la boca, ella habla por las manos, o por los ojos, o por los poros, o por donde sea. Porque todos, toditos, tenemos algo que decir a los demás, alguna cosa que merece ser por los demás celebrada o perdonada.

De las tertulias de este fin, la CiberHaydée, nos reporta: «Muchos son los sueños que los duendes quieren realizar con todo el dinero del mundo: terminar de construir la CUJAE, acabar las guerras, edificar orfanatos y geriátricos, investigación para la salud, comprar computadoras... Pero los más impresionantes eran aquellos que lo repartían entre todos para que cada uno cumpliera sus sueños». También entre ocurrencias, merengue y panecitos se festejaron las 42 rebeldías de Juventud. Y hablando de cumpleaños: la tertulia de la UCI llega al primero en noviembre. Sabemos de buena fuente que preparan fiesta multimedia. Felicidades.

El Comandante del sombrero alón disfrutará de lo lindo el manojo de ocurrencias. Si no has enviado, ¡apúrate! Este sábado cierra el plazo y el 28 el mar latirá con 100fuegos.

Mi francés: Escribir para ti era tan real, que ahora que ya no estás, puedo aún encontrarte en mis poemas. Calipsu

Tony: Puede que no seas lo mejor del mundo, pero... ¿sabes qué?, no quiero conocer lo mejor si, definitivamente, yo tampoco lo soy. Yarita

Solecito: Todos los días me besas el alma. EN

Mi tesoro: Aunque no sepa quererte de la forma que a ti te gustaría, siempre te querré de la mejor forma que sepa. Tu niña