Acuse de recibo
Las cartas de hoy tienen que ver con el servicio de transporte interprovincial de la Empresa de Ómnibus Nacionales (EON), antigua Astro.
La avileña Liudmila Mesa Melo (Calle Luz y Caballero No. 78, entre Serafín Sánchez y Callejas, Morón) durante muchos años ha viajado al municipio camagüeyano de Florida, donde viven sus padres, a través de la EON, en la ruta Chambas-Morón-Camagüey (y retorno). Siempre en este tiempo ha abonado 21 pesos por el pasaje Morón-Florida o viceversa.
Sin embargo, en los primeros días del mes pasado, su papá «fue a la agencia de Florida a reservarme pasaje de regreso para el día 28 de febrero y allí le comunicaron que tenía que reservar hasta Chambas, porque no se podía vender a los tramos, y que eran 28 pesos. Al preguntar el porqué, le respondieron que era una orden nacional. Ya yo había reservado en Morón y me había costado hasta Florida 21 pesos», narra la remitente.
«El 26 en horas de la mañana —agrega— fui a la terminal de ómnibus de Florida para que alguien me explicara el motivo de tal decisión. Allí conversé con María Elena Puerto Nodal, administradora de dicho centro, quien me mostró la Resolución 707 de 2014, artículo seis, capítulo dos, del Reglamento Comercial de la EON, que entre otras cosas decía que para vender tramos tiene que ser con 72 horas de antelación».
«Y yo me pregunto, después de cuatro años de salir esta resolución, ¿ahora es que se pone en práctica, por cierto y no en todo el país? No entiendo que si voy a viajar a Morón y nacionalmente las reservaciones se realizan con 90 días de antelación, tengo que esperar a las 72 horas antes para reservar, sobre todo porque los dos destinos tienen agencias de pasajes», medita la mujer.
También relacionada con la EON es la carta del granmense Orlando Hernández Ponce (Calle 20 No. 9, Niquero). Se duele Orlando de que su familia habanera, «cuando desea viajar hasta Niquero y necesita adquirir regreso no lo puede hacer, si no es por Pilón. De igual forma ocurre que si vivo en Niquero no puedo sacar servicio para La Habana; (…) lo que implica que es necesario ir a rectificar el pasaje a Pilón, a las 7:00 p.m. el día que tiene el regreso, con lo que preciso transitar un total de 39 kilómetros (…), convirtiéndose en doble gasto y otras molestias para personas de avanzada edad cuyos familiares viven distantes de la cabecera municipal (…); se hace mucho más difícil».
Y se pregunta el remitente, razonando sobre alternativas que faciliten la obtención del servicio: «¿Por qué al mismo pasajero no se le admite que llame a Pilón para rectificar la seguridad de su pasaje el día previsto? ¿Por qué a través de la propia terminal de Niquero no se comunica con Pilón para verificar los casos de regreso? ¿Será tan difícil adoptar alguna medida para que se pueda sacar el regreso en esta localidad con independencia de que no sea el destino final?».
La pelota está en la cancha de la EON.