Opher Doron, gerente general de la división espacial de la compañía estatal Israel Aerospace Industries, que gestionó el proyecto, confirmó que el motor principal de la sonda falló. Autor: Reuters Publicado: 12/04/2019 | 11:16 am
Una falla técnica fue la causa del apagón de uno de los motores de la sonda Beresheet en la Luna, lo que la envió a su destino final a una velocidad 500 kilómetros por hora, según informó el equipo del consorcio SpaceIL que diseñó el artilugio.
«La información técnica preliminar recopilada por los equipos muestra que el primer problema técnico ocurrió a 14 kilómetros de la Luna. A 150 metros, cuando se perdió la conexión con Beresheet, se desplazaba a 500 kilómetros por hora, lo que hacía inevitable una colisión», tuiteó la organización sin fines de lucro fundada con el objetivo de enviar la primera sonda espacial israelí a la Luna.
Los especialistas concluyeron que una falla producida en uno de los componentes, provocó que el motor principal se apagara, hecho que imposibilita la desaceleración del descenso de la nave, y ya para cuando se reinició el motor afectado, la velocidad alcanzada era demasiado alta para alunizar de manera correcta.
La sonda israelí Beresheet, que ingresó este 5 de abril en la órbita de la Luna, no logró alunizar en la superficie de nuestro satélite natural como estaba previsto. Este jueves, el centro de mando perdió la comunicación con la sonda después de que empezara su maniobra para posarse en la superficie lunar.
Beresheet, lanzada hace seis semanas a bordo del cohete Falcon 9, de la empresa SpaceX, propiedad de Elon Musk, voló 6,5 millones de kilómetros, alcanzando velocidades de hasta 36.000 kilómetros por hora.
Antes del accidente —cuando se encontraba 22 kilómetros por encima de la Luna—, la sonda logró enviar a la Tierra una imagen, que se convirtió en su último «selfie», y en el que aparece muy próximo a su destino.