El Solar Impulse, el primer avión tripulado que utiliza ese tipo de energía, logró realizar un vuelo internacional entre Suiza y Bélgica, travesía de unas 13 horas de duración, publicó PL.
La nave despegó la víspera desde el aeropuerto de la ciudad suiza de Payerne, con el objetivo de poner a prueba su capacidad de desplazamiento a través de las redes internacionales de tráfico aéreo.
El avión tiene unos 63,4 metros entre los extremos de las alas, y su peso aproximado es de 1 600 kilos, ideal para la instalación de 12 000 celdas fotovoltaicas que lo integran.
Sus fabricantes aspiran que para el 2013 esté listo para dar la vuelta al mundo sin escalas, con la utilización de energías renovables y sin combustibles fósiles.
En abril de 2010 realizó su primer vuelo de 87 minutos sobre Payerne y repitió el periplo en septiembre, con un recorrido de cuatro horas y 20 minutos.