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Holguinero Yuleidi La O Terrer. Autor: Roberto Morejón Publicado: 14/12/2023 | 11:12 pm
HOLGUÍN.— Una tendinitis en 2022 prácticamente convirtió al holguinero Yuleidi La O Terrero en un «eléctrico» de Marabana, al subir a lo más alto del podio sin haber entrenado a plenitud en las tres semanas anteriores, a causa de esa dolencia. Aquella falta de trabajo específico no le impidió ganar el maratón capitalino.
La anchurosa senda frente a la sala Ramón Fonst lo volvió a ver delante en la edición 37, celebrada recientemente, lo cual requiere de un gran trabajo mental y físico para titularse en 2:48.13 horas y hacerse de un cupo a uno de los «Grand Slam» del running global.
A los 40 años de edad, el moense del reparto Rolo Monterrey se define como un seguidor del atletismo «de toda la vida», disciplina en la cual se inició en la adolescencia, cuando participó en un campeonato provincial: «Pero me retiré del deporte un tiempo y retorné en 2008 en largas distancias. A mi edad, pensando de manera realista, solo me propondré completar maratones. Ya que la media maratón necesita de un ritmo de carrera mayor, aunque ahí todavía les doy pelea a muchachos del equipo nacional, en el cual estuve sin haber pasado por escuelas deportivas».
Su entrenador, el perseverante Yunieski Grotestán, y él, decidieron cambiar de planes a última hora, porque había premios en disputa, como el boleto al Maratón de Berlín en 2024, y optaron por los 42 kilómetros y 195 metros en este Marabana.
«Probé suerte —refiere—, pero el volumen de preparación mío (un alistamiento semanal de 75 kilómetros) había estado dirigido a la media maratón. Salió la estrategia y estoy conforme con el tiempo».
Entrando en movimiento se le confirmó una carrera dura sobre el asfalto habanero: «Si no estás preparado te puedes quedar en el kilómetro 30, por eso me concentré mucho. Este año me enfrenté al mismo circuito de 2022. La arrancada temprano y la temperatura fresca me ayudaron mucho, no me desesperé, y me hidraté y energicé suficientemente. Le pedí a Dios mucha fuerza para poder llegar, pues sabía que mis contrincantes estaban preparados y son especialistas de la distancia. En el kilómetro 31 los tenía controlados y
logré mantener el ritmo para alcanzar la victoria. Marabana es la principal carrera cubana y se hace difícil, dada la presencia de corredores de acá y cientos de extranjeros».
Los 75 kilómetros de entrenamiento a la semana en principio le parecieron insuficientes hasta para completar la media maratón, más les tenía fe a su nivel y trayectoria, con resultados en lides nacionales, como las de La Farola, en la cual es máximo triunfador, Marabana, Varadero, Copas Cuba y otros.
«Realizo igual el cross (campo traviesa) e internacionalmente he competido en carreras en Martinica y Guadalupe, en las que obtuve medallas. Competiciones como las de La Farola (de 32 kilómetros de distancia) te fortalecen las piernas y permiten luego estar en forma en maratones o 30 kilómetros».
Por lo regular, se incorpora a concentraciones en la ciudad de Holguín, donde el Inder de la provincia lo apoya con alimentación y alojamiento: «Continuaré entrenando, porque es probable que vaya a México en enero próximo, a una media maratón en Sinaloa. Si todo marcha bien, asistiremos a Berlín por una buena marca, a finales de septiembre. En Varadero, donde he corrido con atletas africanos de tremendo nivel, incursionaré en los diez kilómetros, para no ir cansado a Alemania».
