Lucas Barrón es un ejemplo vivo de superación. Autor: Andina Publicado: 07/01/2019 | 08:04 pm
Lucas Barrón tiene 25 años y el pasado domingo cumplió uno de sus sueños. Junto a su padre, Jacques Barrón, este joven peruano tomó la arrancada en una de las carreras de la categoría SXS en la versión número 41 del Rally Dakar, quizá la prueba motorizada más dura del mundo, que se corre entre el 6 y el 17 de enero en suelo peruano.
Pero Lucas no es un competidor más. Desde el instante en que su padre pisó el acelerador y él echó mano a los mapas, en su posición de copiloto y navegante, el muchacho de Lima se convirtió en el primer competidor con Síndrome de Down en participar en esta competencia. Da igual el resultado. Por diez días, Lucas será el rey de las dunas.
«Esta carrera es buena para mí. Será fácil porque sabemos la ruta. Nuestro objetivo es terminar y llegar a la meta», aseguró el joven antes de comenzar la primera de las diez etapas del Dakar 2019, donde acumulará más de 5 000 kilómetros de carrera por dunas, principalmente, y en la que participan más de 500 pilotos.
En su posición de copiloto, la tarea de Barrón consiste en estar al tanto de cualquier falla mecánica y del estado de la ruta. Y no es la primera vez que se enfrenta a desafíos parecidos, pues en septiembre pasado fue también compañero de coche de su padre en el Dakar Series-Desafío Inca, carrera preparatoria al Dakar 2019, que se corrió en las dunas de Ica, al sur de Perú, y en donde el equipo Barrónx2, como se autobautizó el tándem, terminó en la séptima posición.
Jacques Barrón, ingeniero de 55 años, ha afirmado en varias ocasiones que no tuvo ningún problema con los organizadores del Dakar para inscribir a su vástago en la competencia. El requisito fue el mismo que sigue cualquier competidor: pasar todos los exámenes médicos y contar con los documentos pertinentes.
«Lucas ya tiene la licencia de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) para participar en el Dakar», dijo.
Barrón indicó que Lucas no tiene miedo a nada, sabe qué hacer si surge algún problema mecánico. «Los ojos de Lucas serán los ojos del carro para evitar impactar con otro carro o cualquier objeto», añadió Jacques, quién ya participó en el Dakar en cinco oportunidades.
En sus 5 000 kilómetros —el 70 por ciento de ellos en la arena— el Dakar recorrerá Lima y las regiones sureñas de Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, esta última fronteriza con Chile. Este evento tendrá lugar por cuarta vez en Perú, aunque esta versión se correrá únicamente en este país. Bolivia, Argentina, Paraguay y Chile declinaron ser parte de la prueba por razones económicas.
La etapa más dura para cada auto y camión será el maratón de 370 kilómetros entre Arequipa y Tacna, en la quinta jornada (10 de enero).