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El cátcher Ariel Martínez, uno de los fichajes que mucho debe aprender de su experiencia en Japón Autor: Yuhki Ohboshi Publicado: 25/04/2018 | 08:10 pm
A 22 se elevó ayer el número de peloteros fichados este año bajo el amparo de la Federación Cubana de Béisbol con la rúbrica de sus respectivos contratos de seis que jugarán en Norteamérica, en las ya habituales ligas Can-Am e Intercounty Baseball League (IBL), aunque las noticias desde Italia hablan de una «baja».
Ambos circuitos norteños no tienen vínculos contractuales con la MLB, por lo que sus puertas están abiertas para atletas residentes en nuestro país sin condicionamientos. El paracortos Yordan Manduley regresa por cuarta vez a los Capitales de Québec, de la Can-Am, acompañado por segunda ocasión del estelar Lázaro Blanco.
Mientras, en la IBL, un certamen de la región de Ontario que se juega solo los fines de semana, las Panteras de Kitchener volvieron a interesarse en los servicios del pitcher Noelvis Entenza y el torpedero Yorbis Borroto, pero esta vez doblaron la apuesta en el fortalecimiento del equipo con los fichajes de otro par de serpentineros: Jonder Martínez y Miguel Lahera, quien en 2017 estuvo en la liga Can-Am.
En Italia, de los ocho peloteros que habían firmado al amparo de las autoridades de béisbol de nuestro país, solo el pinero Wilber Pérez está en suspense, pues ahora mismo su club, el Paterno’ Red Sox, se retiró de la Serie A2 —segundo nivel en la pelota profesional de allí— por razones económicas, lo que quiere decir, en otras palabras, que el zurdo pinero está «sin trabajo», pero según nos cuentan desde aquellos lares, anda buscando dónde reubicarse.
Por último, los cuatro jugadores cubanos que forman parte de las nóminas oficiales de sus franquicias en las Grandes Ligas japonesas han vestido los uniformes de sus equipos en la primera división. El último en hacerlo fue Raidel Martínez, quien este año tuvo ese privilegio aunque fuera unas horas, cuando los Dragones de Chunichi lo subieron al principal nivel el pasado 19 de abril.
En los casos de Ariel Martínez y Oscar Luis Colás sus fichajes fueron como jugadores en aprendizaje, por lo que solamente podrán desempeñarse en la segunda división, pero ambos tienen suficientes herramientas para dar el salto en los próximos años.
