Ojalá que la euforia y el frenesí heredados recientemente de su quinta corona individual en los Torneos Giraldilla de bádminton de La Habana, estén patentes en el capitalino Osleni Guerrero (ubicado en el puesto 61 del ranking mundial). Este jueves se inmiscuirá en su penúltimo torneo antes de que se realice el anuncio definitivo en mayo de los exponentes que concursarán en la fiesta olímpica de Río de Janeiro, en agosto próximo.
El capitalino debe de avanzar, misión cardinal que él tiene insertada desde su primera lid en esta temporada, lo más que pueda en esta 21 versión del International Challenger de Perú, que ofrece 4000 puntos al vencedor. Es, sin margen a las dudas, una justa que llega en un buen momento para el cubano, por la cantidad de unidades que aporta y por estar anclado el nuestro en zona de clasificación olímpica. Además, en el single masculino harán acto de presencia 41 atletas de 15 naciones, varias de ellas con cierta tradición en la práctica de este deporte.
En su partido inicial, Guerrero debe alcanzar la victoria con soltura y dominio de la cancha, toda vez que chocará con el local Gustavo Alfredo Salazar, adolescente de 13 años y sin posición en el listado del orbe. Ante la ausencia del irlandés Scott Evans, Osleni es el segundo preclasificado de la liza, por detrás del guatemalteco Kevin Cordon (49).