Víctor ultima detalles para el partido de hoy. Autor: Ricardo López Hevia Publicado: 21/09/2017 | 05:36 pm
DES MOINES, Iowa.— Las emblemáticas construcciones de ladrillos, que se mezclan a ratos con una arquitectura de visos modernos, son un buen motivo para visitar esta ciudad. Pero nada será más tentador hoy por estos lares que el enfrentamiento de la selección cubana y el elenco universitario estadounidense, primero de una serie de cinco partidos que tendrá también como escenario a las norteñas localidades de Omaha, Cary y Durham.
Se repite así una tradición establecida desde hace 26 años, y que se vio cortada hasta la pasada temporada, en la que la novena ahora anfitriona cedió con marcador de 2-3. Y previo al arranque, las expectativas ya merodean el diamante del estadio Principal Park, donde en la tarde de este miércoles el equipo cubano realizó su segunda sesión de acondicionamiento.
Una de las grandes interrogantes es la posible alineación de la joven novena cubana que asumirá esta edición del tope, pues la oportunidad se pinta sola para probar las variadas alternativas que ofrece esta nueva convocatoria del mánager Víctor Mesa.
Algunas pistas se vieron durante la práctica, cuando el capitalino Yasmani Tomás tomó el mascotín y cubrió la primera almohadilla mientras varios de sus compañeros «aceitaban» el madero en la jaula de bateo. La ausencia por lesión del cienfueguero José Dariel Abreu y la falta de un inicialista natural en la nómina, hace pensar en esa opción, o en su defecto la del santiaguero Edilse Silva, como posibles soluciones para defender el primer cojín.
«Me siento muy bien. No es nada raro para mí jugar en la primera base, pues ahí empecé. No jugaba esa posición hace como dos años, pero eso no será ningún problema», comentó a JR Yasmani después de concluida la sesión.
En general, hay alternativas para todos los puestos, y eso multiplica las posibilidades de evaluar los desempeños de quienes deben estar en los planes inmediatos del béisbol cubano.
Lo que sí quedó definido durante una conferencia de prensa previa ofrecida por ambos mánager y varios de sus jugadores, fue la designación del lanzador diestro avileño Vladimir García como el encargado de la primera apertura.
El espigado serpentinero consideró como «un honor y un orgullo haber sido seleccionado para abrir el primer juego contra los estadounidenses, por las expectativas que siempre generan estos juegos. No conozco a los rivales, solo que son universitarios y que conectan muy bien los lanzamientos rectos. Trataré de tirarles bastantes rompimientos en la zona baja para tratar de dominarlos, o que bateen roletazos».
Además, Víctor accedió a develar los planes en dependencia del lanzador rival. Si fuera zurdo, la batería la abriría Dayron Varona como jardinero central. Les seguirían Ariel Sánchez en la pradera izquierda, Yulieski Gourriel en tercera, Yasmani en la inicial, William Luis en el jardín derecho, José Miguel Fernández en segunda, Yunior Paumier como designado, Lázaro Herrera como receptor, y Erisbel Arruebarruena cubriendo el campo corto.
En el caso de que el abridor norteño sea derecho, Ariel sería el hombre proa pero como designado. Por detrás alinearían Irait Chirino en el jardín izquierdo, Yulieski como antesalista, Edilse Silva en primera base, Yasmani en el jardín derecho, José Miguel como camarero, Varona en el centro de los jardines, Herrera como receptor y Arruebarruena como torpedero.
De cualquier forma, los 23 jugadores que ahora integran la armada cubana están listos para saltar al diamante. Después de la primera práctica previa a esta serie, el lanzador villaclareño Misael Siverio abandonó la delegación, lo que dejó al equipo sin lanzadores zurdos en su staff.