Liu Xiang derrotó este sábado al campeón olímpico y recordista universal de los 110 metros con vallas, el cubano Dayron Robles. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 05:17 pm
Es más fácil hablar y escribir de la victoria. Cuando cae el partidario del bando que relata, leyes sin firma ni cabeza ¿obligan? a la omisión de muchos detalles y por ningún concepto se engrandece al vencedor. Con la venia de adeptos y detractores me salto todo eso. Al César lo que es del César.
Resulta que el fenomenal chino Liu Xiang derrotó este sábado al campeón olímpico y recordista universal de los 110 metros con vallas, el cubano Dayron Robles. Esta vez no hubo margen a las dudas ni mucho «bla bla bla», y en espera del venidero Campeonato Mundial bajo techo aconteció la batalla en similar escenario, pero en la arena de Birmingham, Inglaterra, a solo 13 días de la máxima cita a cielo cubierto, con sede en Estambul, Turquía.
El crono final del hijo de Shangai le arrancó alaridos hasta a los gentlemen presentes en el imponente estadio inglés, pues sus 7,41 segundos resultaron lo mejor de la actual temporada, demasiado para los 7,50 del Lord del Guaso, a la postre plateado, aunque sin sal en la medalla.
Quizá previendo algún incidente entre los dos mejores vallistas del siglo XXI los organizadores decidieron colocarlos en carriles separados. Llamó la atención que aunque Dayron tuvo unas envidiables 90 milésimas de reacción en la arrancada según algunos despachos de prensa (por debajo de 100 es considerada salida falsa), no fue penalizado por los jueces. Sin embargo, eso no le bastó ante el empuje del chino (154), quien alardeó de una inmejorable forma deportiva pasándole por el lado sin pedir permiso.
Silva, sola pero convenciendo
Y aunque muchos me recriminen el posicionamiento de este acápite que narra brevemente el primer título de la pertiguista cubana Yarisley Silva en el 2012, opino que ante la ausencia de varias de sus principales rivales y el suspense que suscita el duelo entre Xiang y Robles, la historia va aquí abajo. A fin de cuentas, la jerarquía noticiosa es tan subjetiva y cuestionable cómo la misma teoría de la relatividad. Pero, ¡cuidado!, en nada demerito la tremenda campaña que está dando nuestra representante, quien ya es tenida en cuenta por no pocos especialistas para ascender al podio del venidero mundial bajo capota y de la olimpiada londinense. Dicen que cuando el río suena…
En esencia, y para que no se desesperen, les cuento que la pinareña se quedó a un centímetro de su tope nacional (4,71 metros), para así convencer y coronarse en la reunión atlética de Stabhochsprungde, acaecida este viernes en Postdam, Alemania.
Horas antes del evento las germanas Martina Strutz (subtitular de Daegu) y Silke Spiegelburg cancelaron su participación. De esta forma, Silva vio el camino expedito para ratificar sus potencialidades y el excelente momento en que se encuentra.
La antillana sorteó la varilla a 4,42 y 4,52 metros del suelo en el primer intento. Luego trató con la misma irreverencia a la altura que le dio la victoria, pero no pudo con los 4,80. La plata fue para la danesa Caroline Bonde Holm (4,42) y el bronce colgó del cuello de la local Annika Roloff, dueña del mismo registro.