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Villa anota el primer gol de España. Autor: FIFA Publicado: 21/09/2017 | 04:59 pm
La selección española de fútbol pareció recuperar la memoria este martes al mostrar pasajes del exquisito juego que le permitió ganar la Eurocopa hace dos años con su victoria 1-0 sobre Portugal en los octavos de final del Mundial.
En la próxima ronda, España se medirá con Paraguay, que más temprano hizo historia al vencer 5-3 a Japón en la tanda de penales tras un aburrido empate 0-0 y llegar por primera vez a la lotería de penales.
España salió con todo al ataque y a los cinco minutos ya había tenido dos opciones claras de gol en los pies de Fernando Torres y David Villa, bien conjuradas por el arquero Eduardo.
Andrés Iniesta remató desviado a los 11 mientras España mantenía la presión sobre Portugal, que por su parte no lograba superar la mitad de la cancha con el balón dominado.
A los 19, Iker Casillas salvó su valla ante un remate de Tiago y el posterior embate de Hugo Almeida.
Portugal se fue adelantando y comenzó a inquietar a Casillas con algunos tiros desde lejos de Cristiano Ronaldo, aunque el conjunto luso nunca mostró un juego colectivo amenazador.
España no se amilanó y Villa estuvo cerca de convertir una vez más a los 29, pero su remate salió apenas desviado. La «Roja» se mostró más incisiva hasta el final del primer tiempo.
Portugal salió más decidido en la segunda parte y casi abre el marcador a los 51 cuando un remate de Almeida pegó en Puyol y por poco se mete en la valla por encima de Casillas. Ronaldo generó algunas opciones, pero comenzó a apagarse, al igual que en la primera etapa.
A los 60, Eduardo salvó a su equipo ante un potente cabezazo del recién ingresado Fernando Llorente, mientras que en la jugada posterior Villa remató apenas desviado desde fuera del área.
Villa no falló a los 62, cuando definió de derecha al tomar rebote de Eduardo tras un remate propio con el que había intentado definir una gran jugada colectiva decorada con un exquisito taco de Xavi.
Ahora Villa suma cuatro conquistas y es el máximo artillero del torneo, junto con el argentino Gonzalo Higuaín y el eslovaco Robert Vittek.
Portugal intentó un ataque final en los últimos minutos del partido, aunque con más amor propio que ideas claras.
