Más de 250 modelos bovinas se alistaron para participar en un concurso de dos días en el que se escogió a la vaca más linda. Tras bastidores, las concursantes se prepararon con peinadoras y maquillistas porque, según una de las organizadoras del concurso, igual que con las personas, ayuda si se preparan. Pero, contrario a lo que pasa con las humanas, las vacas más bellas y con más posibilidades de ganar son las más robustas. Las «huesudas», dice uno de los organizadores, no tienen chance de clasificar. ¡Qué bella soy! Muuuu, muuuuu…