Los «misioneros» de la solidaridad compartieron con los niños, los jóvenes y la población en general del barrio El Husillo, uno de los que está en plena transformación en la capital cubana. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 29/05/2023 | 09:32 pm
La Misión de Solidaridad de los miembros de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas (FMJD) con la Mayor de las Antillas, lejos de concluir con la visita a nuestro país, comienza ahora cuando cada uno de sus participantes regresen a sus naciones, «plantando cara a los responsables y cómplices de las agresiones contra Cuba y contra cualquier pueblo, y luchando por la construcción de ese mundo libre de explotación y cualquier tipo de opresión».
Así lo ratificaron jóvenes antimperialistas de decenas de países de todos los rincones del planeta —que durante una semana se reunieron aquí—, y este domingo hicieron pública una Declaración, en la cual reafirman «el apoyo irrestricto a Cuba, a su pueblo y a su juventud» y reconocen «la obra humanista de la Revolución Cubana y su proyecto de justicia social y dignidad plena».
El texto fue dado a conocer por Aritz Rodríguez, presidente de la FMJD, en la jornada final del Consejo general de esa organización —que también sesionó en Cuba—, y cuya clausura, desde el Centro Fidel Castro Ruz, acompañaron Ángel Arzuaga Reyes, vicejefe del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido, y Aylín Álvarez García, primera secretaria del Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas, entre otros invitados.
En la Declaración, sus firmantes destacaron también que «Cuba es un ejemplo para la clase trabajadora y la juventud del mundo en la lucha contra el capitalismo en su fase imperialista». Además, exigieron al Gobierno norteamericano que levante inmediatamente, el bloqueo contra nuestro país.
Significaron que el bloqueo fue recrudecido en tiempos de la pandemia de la COVID-19, y continúa siendo una violación flagrante de los derechos humanos de nuestro pueblo. Además, exigieron la eliminación de la base militar yanqui en Guantánamo y la exclusión de Cuba en la lista unilateral de países que supuestamente patrocinan el terrorismo internacional.
Las voces de las nuevas generaciones también se alzaron para rechazar la guerra cultural, mediática y de símbolos contra la Isla, que se dirige a desestabilizar el orden constitucional, la autodeterminación y la soberanía. Y, además, para expresar su «admiración por la resistencia y creatividad del pueblo para sortear los efectos del bloqueo impuesto por más de 60 años».
Finalmente, se hizo un llamado a la juventud a organizarse y a activar acciones en solidaridad con el pueblo cubano y contra el imperialismo porque «solamente la lucha de la clase obrera y su juventud es garantía de la victoria final. Reafirmamos que Cuba no está sola y que los jóvenes del mundo se levantan con ella».
Como colofón de los intensos días vividos en Cuba, las nuevas generaciones de otros países que nos visitaron recorrieron cada una de las salas del Centro Fidel Castro Ruz y conocieron más de la vida, obra y pensamiento de un hombre que sigue inspirando, sobre todo, desde su proyección como líder político y ser humano, como ellos mismos expresaron.