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Debemos cambiar sin renunciar a nuestros principios

Este miércoles desde el Palacio de Convenciones de La Habana, el Jefe de Estado reflexionó sobre las maneras de hacer y los retos y desafíos que enfrenta el país

Autores:

Marianela Martín González
Ana María Domínguez Cruz

Uno de los objetivos del año es combatir la compleja situación económica y social con un aseguramiento político desde el Partido, que estimule la comprensión y la participación del pueblo y fortalezca la unidad, aseguró Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, al intervenir en la última jornada de preparación de los diputados, previa a la Segunda Sesión Extraordinaria de la 10ma. Legislatura del Parlamento, que comienza hoy.

Según la Agencia Cubana de Noticias, este miércoles desde el Palacio de Convenciones de La Habana, el Jefe de Estado reflexionó sobre las maneras de hacer y los retos y desafíos que enfrenta el país. Como otro objetivo, añadió la necesaria preparación de la reserva de cuadros para ocupar dentro de cinco años las más altas responsabilidades partidistas, de Estado y Gobierno del país.

En otro momento, el mandatario se refirió al recrudecido bloqueo norteamericano y destacó la necesidad de continuar la construcción del socialismo, conjugando el reto entre la alternativa necesaria y lo posible en el proceso y su proyecto. Personas en el mundo sostienen que el pueblo de Cuba merece prosperidad, y reconocen la heroicidad de nuestra gente durante años, acotó.

Convocó a que los jóvenes encuentren en nuestra realidad sus epopeyas y que puedan participar en todos los espacios en pos de su preparación y realización. Sobre los conceptos esenciales del proyecto social cubano reflexionó que más que consignas deben ponerse en práctica en los momentos actuales.

Para el Presidente cubano es fundamental asegurar el funcionamiento eficaz de las instituciones, pues cuando estas funcionan mal desacreditan el proceso revolucionario, y expuso un sistema de trabajo basado en cinco direcciones: el desarrollo económico, la atención a los problemas sociales, la fortaleza institucional, el trabajo con los cuadros y la fortaleza ideológica.

Díaz-Canel señaló que otro asunto al cual prestar especial atención es el impulso a la producción local de alimentos, y que para ello la empresa estatal agropecuaria debe recuperar su papel y se tiene que reforzar un sistema de trabajo territorial. Añadió que para atenuar los altos precios es fundamental producir más.

Debemos cambiar todo lo que tiene que ser cambiado, pero sin renunciar a nuestros principios, sin apartarnos del concepto de Revolución, apuntó el Primer Secretario del Partido y acotó que el camino está lleno de desafíos que estamos obligados a enfrentar y a superar con espíritu de victoria, poniéndoles el pecho a las balas.

Una Cuba pequeña

«Nuestra Asamblea tiene una fortaleza inigualable, es diferente al resto del mundo. Esta es una Cuba pequeña. Estamos todos: el obrero, el economista, el periodista, el médico, el maestro, el artista, el ingeniero, el científico, el sector no estatal… Por eso, todo lo que hagamos aquí repercute en nuestra población», aseveró Homero Acosta Álvarez, secretario de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado.

Su intervención aconteció este miércoles, previo a la sesión extraordinaria de la Asamblea, la cual analizará, entre otros temas, la situación económica del país y el proyecto de ley de Comunicación Social.

Acosta Álvarez apuntó que lo que el enemigo intenta boicotear, lo defendemos aquí, en representación de todo el pueblo. «Aquí se llega sin tener que pagar campañas, sin tener que recurrir a financiamientos dudosos para ganar votos, sino por la responsabilidad y el compromiso que tenemos con la población.

«La heterogeneidad de la Asamblea es su fortaleza. Además, confluyen diversas generaciones y eso es una ventaja, y es una particularidad también que el 50 por ciento de los delegados vengan de la base. Somos diputados todos, y tenemos la responsabilidad igual, sin importar el nivel.

«Los delegados de base tienen una relación más directa con la población y son los que poseen la verdadera legitimidad al ser elegidos por el pueblo directamente. Ese es el primer paso para que la Asamblea se vea como una gran nación, no como algo fragmentado. La experiencia cotidiana del delegado, por tanto, es lo que la enriquece.

«Las decisiones que adoptemos aquí es lo que al pueblo realmente le interesa», insistió Acosta Álvarez, quien recalcó la urgencia de aumentar la producción nacional de alimentos para reducir la dependencia de las importaciones y garantizar la seguridad alimentaria del país.

Con rigor y transparencia

Al intervenir en el plenario, Esteban Lazo Hernández, presidente del Parlamento y del Consejo de Estado enfatizó en que todo lo que apruebe la Asamblea debe tener un rigor estricto. «Las leyes se entregan con tiempo suficiente para establecer la dinámica correcta para su control y su proceso de aprobación. En esta legislatura tendremos que debatir 53 leyes, lo cual demuestra que trabajamos por mantener un Estado de derecho que, además, está comprometido con el pueblo».

Recordó el llamado a que la rendición de cuentas de los diputados sea aún más transparente. «Que el pueblo participe, el mismo pueblo que eligió a sus delegados y que también sepa el destino de los presupuestos. Que sepa lo que se ingresa y lo que, entonces, podemos gastar». Y reiteró que es esencial mejorar la capacitación y formación de los cuadros, y mantener como un objetivo vital la participación de los jóvenes.

El diputado por el municipio capitalino de Arroyo Naranjo, Raúl Alejandro Palmero Fernández, dijo que la población le dará credibilidad a los diputados según sean capaces de establecer un vínculo cercano y efectivo con ella, escuchar sus necesidades y demandas y resolverlas, porque algunas necesitan recursos, pero otras basta con organización y planificación.

Lazo Hernández subrayó la importancia de explicarle a la población las responsabilidades y deberes de los diputados y los delegados, «porque cada cual puede resolver un problema según su alcance, su radio de acción. Nuestro objetivo es la unidad del poder». En ocasiones falta la interrelación, las acciones en conjunto, y por ello no se obtienen los resultados que esperamos, añadió.

La diputada por el municipio tunero de Manatí, Marlenis Urquiola, expresó que lo fundamental es que se tramiten las inquietudes y que no se estanquen en el tiempo. Y el diputado de Sagua de Tánamo, en Holguín, Yusuam Palacios Ortega, abogó por la integración y ante todo, por «no regresar a los municipios sin las respuestas que la población de esos territorios espera».

Acosta Álvarez recordó que la legislatura anterior marcó pautas importantes en la actividad legislativa, intensa y productiva, porque permitió crear bases más sólidas en nuestra sociedad en lo relacionado con los derechos y el ejercicio de las atribuciones del Parlamento.

«Debemos estar preparados y organizarnos para desarrollar y superar lo logrado. Debemos impulsar medidas para fortalecer el sistema de órganos representativos de las Comisiones Permanentes, los Consejos Populares y todas las instancias vinculadas a la Asamblea Popular, para que su labor sea más certera».

Es esencial el trabajo comunitario integrado

La diputada por el municipio de Santa Cruz del Norte, Miriam Brito Sarroca, se refirió al acuerdo del Consejo de Estado sobre el trabajo comunitario integrado y destacó su importancia en el contexto actual, así como la necesaria participación activa de las organizaciones de masa y  del pueblo para que cumpla su objetivo.

«El trabajo comunitario integrado está compuesto por el diagnóstico, la elaboración y ejecución del plan de acción y, por último, el seguimiento y evaluación del proceso e impacto del mencionado plan de acción. Lo que hagamos y no se controle no tiene continuidad», precisó.

Al referirse a este tema, el Presidente del Parlamento y del Consejo de Estado afirmó que «el socialismo se construye desde los barrios, en las comunidades. Allí vivimos todos, pero no siempre se tiene la conciencia de que los barrios son la esencia de lo que podemos construir como sociedad».

Otro tema de preparación fue las labores de las comisiones permanentes de trabajo de la Asamblea Nacional, el cual impartió la diputada por el municipio de Santiago de Cuba, Marta Hernández Romero. En tal sentido, comentó que en esta legislatura se ha renovado significativamente la membresía de las comisiones para el mejor desempeño de sus atribuciones.

Y Enrique Moreno Gimeranez, director de Comunicación de las Oficinas Auxiliares del Parlamento, se refirió a la comunicación social como pilar imprescindible en la gestión del Poder Popular, labor en la que todos somos protagonistas y por ello desde todos los órganos del poder del Estado se debe establecer una estrecha coordinación con las organizaciones políticas y de masas.

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