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La Organización de Pioneros José Martí entregó un reconocimiento especial a Esther María de la O Ochoa, pedagoga de excelencia con 55 años de ejercicio profesional, todos en la Educación Especial y de estos más de 30 como directora de la escuela Solidaridad con Panamá. Autor: Ariel Ley Royero Publicado: 06/01/2022 | 10:27 pm
En la Escuela Especial Dora Alonso, en Ciudad Escolar Libertad, aconteció este jueves el acto central por los recién cumplidos 60 años de la Educación Especial en Cuba, obra de enorme sensibilidad humana e infinito amor, hija de la Revolución y de su líder eterno, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, reportó la Agencia Cubana de Noticias.
La institución, que atiende las necesidades educativas especiales de niños con trastornos del espectro autista, y que fue inaugurada por el propio Fidel Castro, precisamente un 4 de enero, 20 años atrás, se cuenta entre los colectivos y educadores a los cuales se premió por su consagración, méritos, trayectoria y resultados.
Esther María de la O Ochoa, pedagoga de excelencia con 55 años de ejercicio profesional, todos en la Educación Especial y de estos más de 30 como directora de la escuela Solidaridad con Panamá, recibió de la Organización de Pioneros José Martí un reconocimiento especial.
Con la condición de Proeza Laboral, que otorga la Central de Trabajadores de Cuba, fueron galardonados José Carlos Cánovas, Esther Fernández, Yunisleidys Perdomo, Milagros González y Beatriz Santiesteban, quienes cuando la pandemia obligó a interrumpir las clases presenciales asumieron como teleprofesores la tarea de impartir los contenidos orientados a los alumnos de la Educación Especial y a sus familias en todos los niveles educativos.
Como un gran abrazo capaz de alcanzar a cuantos laboran en la Educación Especial, Beatriz Roque Morales, directora nacional de esa enseñanza en el Ministerio de Educación, recibió del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte el sello conmemorativo del aniversario 60 de su creación.
De fruto genuino de la Revolución y de su espíritu solidario y humanista calificó Roque Morales la que, más que un tipo de educación, constituye en Cuba todo un sistema de instituciones, servicios, modalidades de atención, soportes profesionales, recursos y vías de extensión, a disposición de las personas con necesidades educativas especiales, sus familias, los docentes y la comunidad.
Si al triunfo de la Revolución el país apenas contaba con ocho escuelas, una veintena de docentes y poco más de un centenar de educandos, hoy dispone de 344 centros de este tipo, con una matrícula de cerca de 32 500 alumnos y 14 565 profesionales para atender sus necesidades educativas especiales.
Y están esas escuelas, pero la familia decide si hace uso del servicio, y de no aceptarlo corresponde a la Educación Especial, con sus recursos
especializados, preparar a la escuela regular, y desde ahí actuar también para entre todos garantizar una educación de calidad y contribuir al adecuado tránsito del alumno por el sistema de enseñanza, su formación integral, el pleno desarrollo de sus potencialidades y una participación activa en la sociedad, señaló.
La Directora Nacional de Educación Especial en el Mined significó el quehacer extensionista de las escuelas especiales, que las convierte en centros de recursos y apoyos para la atención en cualquier contexto, incluidos hospitales y salas de pediatría y los propios hogares, en el caso de niños imposibilitados de asistir a las aulas.
Ciertamente, en la Educación Especial hay asignaturas específicas, de acuerdo con la discapacidad y orientadas a corregir, compensar y facilitar los procesos de inclusión, pero, aunque con adaptaciones, las escuelas especiales toman como base el currículo general de cada nivel educativo, de ahí que, llegada la hora del tránsito, la inserción en la escuela regular ocurra de modo natural, refirió.
Añadió que eso explica, además, que durante la pandemia de COVID-19 los alumnos de esos centros hayan podido seguir desde sus hogares las actividades docentes televisivas correspondientes al grado que cursan, acompañadas, eso sí, de orientaciones a la familia por esa y otras vías de información, comunicación e intercambio.
Roque Morales habló también de los retos, porque no todo está hecho y logrado, y el 3er. Perfeccionamiento del Sistema Nacional de Enseñanza constituye una herramienta para seguir avanzando en pos de una educación cada vez más inclusiva y de calidad, a pesar de ese feroz y genocida bloqueo imperial de Estados Unidos, que tanto daño ocasiona y que en el caso de una educación como esta, ya de por sí costosa, todo lo encarece y dificulta infinitamente más.
La directiva del Mined felicitó a los trabajadores de la Educación Especial, agradeció su entrega, su altruismo, ese amor que todo lo puede, por sus alumnos, por Cuba, por la Revolución y su obra de justicia y equidad, por nuestro Héroe Nacional José Martí y por Fidel.
Presidieron el acto nacional, a propósito de la celebración, Liudmila Álamo Dueñas, vicejefa del Departamento de Atención al Sector Social del Comité Central del Partido Comunista de Cuba; Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación; y Martha del Carmen Mesa Valenciano, presidenta de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de la Asamblea Nacional del Poder Popular.
