La Unión de Jóvenes Comunistas reconoció la entrega y dedicación de las nuevas generaciones del hospital pediátrico William Soler. Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 23/09/2021 | 09:22 pm
Entre el ajetreo propio de una institución hospitalaria, resalta el rostro de los jóvenes del cardiocentro pediátrico William Soler, quienes —con profesionalidad y mucho amor— trabajan para que los pequeños pacientes y sus familiares regresen a casa más seguros y sanos.
Ese afán, que define a la mayoría de los profesionales de la salud, fue reconocido por el Comité Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC), en un encuentro que premió, además, las ganas de superación y el compromiso con el desarrollo del país que han sabido mantener las nuevas generaciones de este centro.
Miembros del Buró Nacional de la UJC dialogaron con jóvenes trabajadores del cardiocentro pediátrico William Soler.
Yosmel Duany Álvarez, miembro del Buró Nacional de la UJC, recalcó la importancia de que tanto la juventud como el resto del personal de la institución sigan dando todo por la salud de los niños y la tranquilidad de las familias, esa misión que en la apertura de la institución encomendó Fidel.
Para Osvaldo Félix Tadeo Domínguez, técnico en Electromedicina, uno de los mayores retos que asumen es superar los impactos negativos del bloqueo, sobre todo en piezas necesarias para reparar los equipos. A sus 21 años, busca alternativas para que esta dura realidad no perjudique el tratamiento de niñas y niños, pues asegurar su bienestar siempre será la prioridad máxima.
Se entregó un reconocimiento especial al centro y su colectivo conducido por el Eugenio Selman.
En este encuentro se entregó la condición Jóvenes por la Vida a galenos destacados.
«Nuestra mayor recompensa, el galardón más grande que podemos recibir, es la sonrisa de los pacientes», afirma Alejandro Gabriel Comas Brodska. El enfermero de 20 años sabe que no hay dinero en el mundo que supla ese agradecimiento, por ello lo reconforta tanto saber que con su quehacer diario salva las vidas y devuelve la esperanza las familias.
Precisamente, esa noble labor es la que comparten los más nuevos en las redes sociales, como dijo la sicóloga Amalia Cánovas Rodríguez. «En ocasiones nos han bloqueado la cuenta de Facebook del centro, pero no nos hemos rendido y seguimos mostrándole al mundo los logros de la medicina cubana», dijo la joven de 29 años.
En este encuentro —al que también asistió Ana Rosa Granda Esteban, primera secretaria del Comité Provincial de la UJC en La Habana— se entregó la condición Jóvenes por la vida a galenos destacados, y un reconocimiento especial al centro y su colectivo conducido por el Eugenio Selman, por su arduo trabajo ante la situación epidemiológica actual y los 35 años que cumplió recientemente.