Díaz-Canel les confió a los estudiantes de la Universidad del Deporte que este era un «encuentro de continuidad». Autor: Estudios Revolución Publicado: 21/05/2021 | 01:22 am
Poco más de dos meses atrás el Presidente Díaz-Canel había prometido volver, y este jueves cumplió su promesa. Muchas experiencias e ideas quedaron sin compartir el pasado 12 de marzo, cuando acudió al encuentro de un grupo de estudiantes y profesores de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte Manuel Fajardo, que durante el último año han participado activamente en el enfrentamiento a la COVID-19.
Este es «un encuentro de continuidad», les confió el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista. Compartir con ustedes, escuchar sus argumentos, sus ideas —aseguró— enriquecen la percepción de «que podamos tener de la manera en que se ha ido transformando la Universidad del Deporte y la forma en que ustedes están participando».
Entre el desenfado y las emociones de los jóvenes presentes —muchos de los cuales dos meses atrás cumplían con el período de cuarentena establecido luego de haber trabajado en un centro de aislamiento y no compartieron con el Presidente— fueron reviviendo las historias de estos complejos meses, en los cuales nuestros jóvenes han tenido siempre una pregunta en ristre: «¿Y ahora, qué me toca hacer?».
Justamente de su hacer, aun en medio del agotamiento y el estrés que entraña la atención a pacientes contagiados con el virus o sospechosos de estarlo, han nacido propuestas para enriquecer protocolos de actuación, levantar el ánimo de los enfermos, perfeccionar métodos, crear, desafiar, vencer...
«Dice mi mamá que yo trabajo más allá adentro que en mi casa», espetó al Presidente de la República la estudiante de primer año Yerlín Valdés Goicochea. Y es verdad, reconoció ante el auditorio la joven que, en el centro de aislamiento de la Universidad de Ciencias Informáticas, asumió la compleja tarea de garantizar parte del trabajo logístico.
Los pacientes entran a cualquier hora, y tenemos que estar siempre listos para atenderlos; cambiar los avituallamientos a quienes ya están ingresados y un sinfín de tareas que dejan en 14 días poco tiempo para el descanso, detalló la muchacha.
Al principio tenía mucho miedo de estar en la zona roja, confesó, pero al susto inicial y los lógicos contratiempos se han impuesto lindas experiencias, «los lazos que se crean allí son inquebrantables, son para toda la vida».
A Ernesto Javier Sánchez Lago la emoción lo supera a ratos. Tiene incontables anécdotas por compartir, pues son muchos los centros de aislamiento en los que ha laborado y desde su responsabilidad como Presidente de la Federación Estudiantil Universitaria de este centro no deja de idear y hacer.
Esta Universidad, que nadie lo dude, también forma, aseguró a Díaz-Canel, con quien compartió cómo los estudiantes han sabido llevar a los diferentes lugares donde han sido convocados los conocimientos adquiridos durante el estudio en las aulas y que alivian el estrés y el agotamiento, no solo a los pacientes, sino a ellos en sus momentos de descanso. «Nuestra Universidad ha crecido, y me enorgullece ser parte de ella».
Con él indagó el Jefe de Estado sobre cómo ha sido la experiencia de llevar adelante el curso a distancia: «¿Tiene calidad? ¿Cómo lo han asumido los estudiantes?»
Sí, tiene calidad, aunque lógicamente esperamos hacerlo mejor en el segundo período, le dijo el joven. Se ha realizado un proceso de recogida de opiniones de los estudiantes que tiene como propósito perfeccionar lo que hemos estado aplicando.
Al respecto, el rector de la Universidad, Silvano Merced Len, puntualizó al Presidente cubano que ha sido muy positivo el balance que han realizado, aun cuando han existido algunas dificultades.
La alianza establecida con los Joven Club de Computación y Electrónica en los territorios ha resultado esencial para la conexión e intercambio con todos nuestros estudiantes, incluso aquellos que no disponen de datos móviles propios.
De agradecimiento, entrega, pasión, motivaciones y ganas de hacer hablaron los jóvenes al mandatario. Y lo hicieron desde la responsabilidad que saben sobre sí, por la profesión que desempeñan, de contribuir con acciones concretas a mitigar y eliminar los efectos adversos que física y sicológicamente va dejando la epidemia en la población cubana, de manera especial entre los niños.
Consciente de las diversas afecciones sicológicas que pueden estar padeciendo los más pequeños de casa en estos momentos, producto del aislamiento social y de no acudir a las aulas, la joven profesora Evelyn Romero Fernández comentó acerca de las acciones que se han propuesto desarrollar desde la recreación para apoyarlos y hacer más llevadera la reinserción a las rutinas habituales.
A través del juego y el ejercicio físico tenemos que ser capaces de encontrar maneras para que socialicen con sus compañeros, consideró. Los niños han vivido momentos difíciles, no solo ocasionados por el distanciamiento físico, algunos incluso han sufrido pérdidas personales o se han contagiado con el virus, lo cual inevitablemente deja huellas desde la sicología.
Un quehacer que traza caminos
Las vivencias compartidas esta vez también marcan hitos en el quehacer cotidiano y definen el actuar de estos jóvenes, a quienes el Presidente de la República confió su certeza de que constituyen una generación de estudiantes que, como profesionales de la Cultura Física y el Deporte, está muy sólidamente formada.
Ustedes tienen una formación, que se les nota por la manera en que se expresan, revolucionaria, humanista y muy profesional; hablan en términos muy exactos en relación con la innovación, al papel del deporte y la cultura física, como una perspectiva para la vida de las personas y en su aporte a la sociedad, subrayó.
Eso también va nutriendo al claustro de una continuidad generacional de profesionales, que pone a la Universidad en un momento superior, valoró Díaz-Canel, quien estuvo acompañado por el vice primer ministro Jorge Luis Perdomo Di-Lella; Osvaldo Vento Montiller, presidente del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación; y las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en la capital.
Sobre la valía del aporte de los jóvenes en el enfrentamiento a la COVID-19 comentó otra vez el mandatario, porque muchas de sus vivencias, les dijo, han sido de gran utilidad para perfeccionar modos de hacer en los centros de aislamiento y otros espacios donde han participado.
«Ustedes son continuidad, pero también son un elemento importante en la unidad que tenemos que preservar para que la Revolución siga adelante y, por tanto, constantemente tendremos que estar viendo con ustedes la manera en que los jóvenes van a estar participando en nuestra sociedad; hay muchas tareas».
Entre esas muchas tareas a las que están convocados nuestros jóvenes, el Jefe de Estado detalló el papel que tienen por delante, porque «cada vez que nos hablan nos inspiran en temas y tareas que debemos atender».
Uno de los más importantes retos que dejó en ellos fue el de, a partir de sus propios conceptos, contribuir a perfeccionar las clases de Educación Física, no solo en las universidades sino en todo el sistema de Educación.
Estas clases —reflexionó— tienen que motivar a los estudiantes, desarrollar el trabajo en equipo, los sentimientos de solidaridad, de cooperación; tienen que levantar ese espíritu de abnegación, de rigor, de sobrepasar situaciones difíciles.
«La Educación Física es una asignatura totalmente formativa en la personalidad y también en la concepción de las personas sobre el trabajo en colectivo y no siempre damos una buena clase».
Con ellos compartió, además, el desafío de seguir avanzando en el perfeccionamiento de la enseñanza a distancia; en la integración al combate en las redes sociales para desmontar provocaciones enemigas; y en la propuesta de ideas para diseñar entre todos un verano creativo, que a pesar de la pandemia permita el disfrute de nuestro pueblo.
Finalmente, consideró de vital importancia realizar un encuentro de los jóvenes de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte con la delegación que representará a Cuba en los Juegos Olímpicos de Tokio.
Sus vivencias, estimó, pueden impregnar en nuestros atletas la esencia de todo lo que han estado aportando y viviendo en estos meses. «Eso será un estímulo y un compromiso para esa delegación, para con su actuación enaltecer una vez más los logros de la Revolución y darle a este pueblo un grupo de satisfacciones también con victorias olímpicas».
Es el barrio quien mejor conoce a su gente
En la comunidad había iniciado su jornada de trabajo este jueves el Presidente de la República. Hasta el consejo popular Balcón Arimao, del municipio capitalino de La Lisa, llegó también para saldar la promesa hecha a Maritza López McBean de visitar la sede de la Red Barrial Afrodescendiente, contra el racismo y la discriminación racial.
Es este un proyecto comunitario desde el cual se da vida al barrio y en el que se mezclan los más diversos temas. El pequeño espacio, lo mismo sirve de sede para un aula de la Universidad del Adulto Mayor, que para el ensayo de algún proyecto cultural; más recientemente, la sede ha funcionado como puesto de mando para el enfrentamiento a la COVID-19.
Sobre él había conocido el mandatario cubano durante el encuentro realizado en el pasado mes de marzo, en el Palacio de la Revolución, para evaluar el Programa contra el racismo y la discriminación racial, al cual asistió como invitada Maritza en su condición de coordinadora general.
El Presidente cubano destacó en la sede de la Red Barrial Afrodescendiente la importancia de apoyar proyectos como este. Foto: Estudios Revolución
Más de 20 000 habitantes tiene este consejo popular, donde la Red ha logrado un estrecho vínculo con el barrio, buscando cómo hacer para resolver las problemáticas que allí más inciden. Además, han realizado acciones en todos los consejos populares de Marianao y en dos de la provincia de Matanzas.
Lo más importante, comentó López McBean, es la multiplicidad de saberes que hemos logrado en estos años y la manera en que hemos podido reforzar la identidad a partir de nuestro actuar cotidiano.
Proyectos como este, que nacen desde el barrio, hay que apoyarlos, reconoció Díaz-Canel, quien estuvo acompañado por la vice primera ministra Inés María Chapman Waugh; el ministro de Cultura, Alpidio Alonso Grau; y las máximas autoridades del Partido y el Gobierno de La Habana y también del capitalino municipio donde está enclavado el proyecto.
Sustentado en la premisa compartida con todos por el Presidente cubano de que «es el barrio quien mejor conoce a su gente» y quien mejor puede ayudar a transformar para bien la realidad que lo circunda, el encuentro ratificó la certeza de que es posible educar desde todos los espacios.