La ministra de Finanza y Precios, Meisi Bolaños Weiss, reiteró que en «Cuba y en su presupuesto no se aplicarán terapias de choque, nadie quedará desamparado ni abandonado a su suerte». Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 18/12/2020 | 03:24 am
Aun en medio de las dificultades y complejidades que en el orden económico afrontará el país en el año 2021, el Presupuesto del Estado cubano «mantiene su carácter eminentemente social y tiene como premisa seguir siendo garante financiero en la salvaguarda de las conquistas de la Revolución».
Así señaló la ministra de Finanzas y Precios (MFP), Meisi Bolaños Weiss, en la presentación del Informe del Proyecto de Presupuesto del Estado para el año 2021, aprobado la víspera en el 6to. Período Ordinario de Sesiones de la 9na. Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en la que participaron el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Partido, y Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República.
En Cuba y en su presupuesto, reiteramos, no se aplicarán terapias de choque, nadie quedará desamparado ni abandonado a su suerte, ratificando que el Estado y el Gobierno, en cualquier circunstancia, ponen al ser humano en su centro de atención, afirmó la titular del MFP.
Al indicar que las principales características del Presupuesto del Estado para 2021 responden al primer año de la implementación del ordenamiento monetario y cambiario en el país, explicó que este se diseñó como «un presupuesto reconvertido», que toma en sus cifras dimensiones superiores, como resultado de la aplicación de los principales aspectos que caracterizan la tarea.
Están asociados a la corrección gradual de los precios mayoristas y minoristas resultante de la devaluación del peso cubano, la aplicación de la Reforma general de salarios y pensiones, el incremento de las prestaciones monetarias de la asistencia social, y la eliminación de los subsidios excesivos y gratuidades indebidas.
Se sustenta —además— «en su carácter eminentemente social, al financiar los programas sociales y los servicios básicos que constituyen conquistas de la Revolución, subsidiar productos y servicios altamente sensibles para la población; así como el apoyo financiero al sistema empresarial y la continuidad de programas productivos en sectores estratégicos, fundamentalmente en la producción de alimentos».
Bolaños Weiss informó que para 2021 se proyecta recaudar ingresos brutos por 291 259 millones de pesos. Los ingresos tributarios representan el 39 por ciento; y los aportes vinculados a los resultados empresariales, 30 por ciento del total de ingresos, superando los 87 376 millones de pesos.
La recaudación del Impuesto sobre Ingresos Personales se planifica en 6 844 millones de pesos; y los aportes de las formas de gestión no estatal representan el cuatro por ciento de los ingresos brutos.
En la Contribución Territorial para el Desarrollo Local se prevé recaudar 5 315 millones de pesos aproximadamente, el 50 por ciento de cuya recaudación podrá ser utilizada por los gobiernos locales como fuente de financiamiento para los programas y proyectos que integran la Estrategia Territorial.
Los gastos
El Presupuesto del Estado proyecta gastos totales por 374 846 millones de pesos. Para garantizar los programas sociales de la Revolución, desde la actividad presupuestada se planifican 243 788 millones de pesos, que incluyen la financiación de los gastos de personal y tributos asociados a los nuevos salarios incrementados del sector, que ascienden a más de 87 500 millones de pesos.
También aseguran las pensiones y las prestaciones de la Asistencia Social; el respaldo de los niveles de actividad de los programas sociales y los servicios básicos a la población, así como los que soportan el funcionamiento de la administración pública.
Del importe total de gastos de la actividad presupuestada, se destinan en el Presupuesto de la Seguridad Social 33 139 millones de pesos, a las que tienen derecho los trabajadores jubilados y pensionados (más de 1 600 000 personas), con valores incrementados. El monto tiene un resultado deficitario de 11 550 millones de pesos, que será financiado por la Cuenta del Presupuesto Central.
A la Educación se le destina el 24 por ciento de los gastos de la actividad presupuestada y a la Salud Pública y la Asistencia Social, el 28 por ciento, corroborando como un derecho humano inalienable en nuestro país —señaló—, el acceso a los servicios de salud y que todo el pueblo cubano sin distinción, reciba una atención universal, gratuita y de calidad.
Para la Asistencia Social, se planifica una reserva desde los presupuestos municipales de 716 millones de pesos, para asistir a los núcleos y personas vulnerables que en la implementación del ordenamiento monetario y cambiario requieran ayuda para cubrir los gastos esenciales de vida, al verse
imposibilitados de trabajar y se encuentren en condiciones de mayor vulnerabilidad. Para este proceso —enfatizó— se debe trabajar por las estructuras locales, con alta sensibilidad, agilidad y control, que propicien se otorguen estos recursos a los que verdaderamente lo necesiten.
Para la Cultura y el Deporte se prevén gastos por 11 214 millones de pesos, con lo que se brindan ofertas artístico–culturales, y se financian, no sin res-
tricciones, las prácticas sistemáticas de deportes.
El Presupuesto del Estado para el año que comienza también asegura el desempeño de los órganos y organismos de la Administración Central del Estado; y procesos de ciencia e innovación, una política por lo cual no es casual —ejemplificó la Ministra— «que Cuba haya sido el primer país en América Latina y el Caribe en tener cuatro candidatos vacunales contra la COVID-19 en fase de ensayos clínicos, a lo que le precede el empeño y la experiencia de nuestros científicos, instituciones de salud y en el campo de la biotecnología».
Con el propósito de proteger a la población por el efecto de la devaluación del peso cubano y el consecuente incremento de los precios, también se subsidian los precios y tarifas de un grupo de productos de alto impacto y sensibilidad para la población. Para este fin se destinan 26 263 millones de pesos.
Entre los principales productos y servicios que se subsidian desde el presupuesto estatal se encuentran, enumeró Bolaños Weiss: «las entregas específicas a los niños como parte de la canasta familiar normada; las dietas médicas que se otorgan a las embarazadas; de retrovirosis, para fórmula basal y por enfermedades crónicas de la infancia; los productos de la canastilla, los servicios de óptica y calzado ortopédico
profiláctico, los medicamentos controlados, que se expenden a las personas que padecen de enfermedades crónicas y otros medicamentos que lo complementan, así como los productos del programa de Medicina Natural y Tradicional.
Además «se subsidiarán parcialmente las tarifas de los servicios de electricidad en aproximadamente 18 000 millones de pesos, los servicios de transportación urbana de pasajeros, aéreos nacionales, por catamarán y la transportación por ferrocarril, entre otros».
En función de la producción de alimentos, se subsidiarán con 1 672 millones de pesos una parte del precio de acopio por las producciones de arroz, maíz seco, huevo fresco, tomate para la industria y el café cereza.
El objetivo de esta partida es financiar la diferencia existente entre el precio de producirlo en el país y el de referencia en el mercado externo. Se proyecta respaldar, además, programas de desarrollo de la ganadería, mantenimiento silvícola y forestal y para la protección de la Flora y la Fauna.
En cumplimiento de otros de los propósitos de la Estrategia Económica y Social, se proyectan 1 800 millones de pesos para el fomento al sector agropecuario, lo que coadyuvará a que la banca cubana pueda prestar servicios crediticios y financieros al menor costo posible a los productores.
El presupuesto en 2020
Al explicar el comportamiento del Presupuesto del Estado para el año que termina, y que fue aprobado por la Asamblea Nacional en diciembre de 2019, la titular del MFP explicó que se caracterizó por una reducción significativa de los ingresos provenientes de las exportaciones, incluyendo los servicios turísticos, contracciones de los niveles de actividad productivos; así como la suspensión o disminución de actividades que se ejercen por las formas de gestión no estatal, motivado por las medidas de enfrentamiento a la COVID-19.
Para enfrentar la pandemia se han respaldado desde el Presupuesto del Estado gastos por más de 1 300 millones de pesos en las acciones de prevención y contención, atención a los enfermos y sospechosos, funcionamiento de los centros de aislamiento, medicamentos y en la protección a trabajadores que por diferentes razones se interrumpieron laboralmente.
Como resultado de todo lo anterior, en la ejecución del Presupuesto se estiman gastos totales por 76 204 millones de pesos e ingresos por más de
55 000 millones de pesos, de lo que resulta un déficit fiscal en el entorno de los 20 733 millones 900 000 pesos.