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Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) Autor: LAZ Publicado: 21/12/2019 | 11:23 pm
Viñales, Pinar del Río.— Transformar, plantear ideas nuevas y enriquecer el trabajo de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC); construir espacios para la autocrítica y el debate profundo; aportar alegría y responsabilidad a las tareas… Son diversas las propuestas, pero todas buscan un objetivo común: hacer de la UJC una organización con la que las nuevas generaciones se sientan comprometidas y en la que vean sus intereses bien representados.
Y es que los momentos actuales requieren del dinamismo, la creatividad y el entusiasmo de la juventud, esa que hoy, además, aboga por potenciar la preparación política e ideológica, el conocimiento de la historia, la defensa de la patria y el trabajo en las redes sociales para hacer frente a las campañas subversivas del imperialismo contra la Revolución Cubana.
Así lo plantearon los delegados viñaleros a la asamblea de balance 11no. Congreso de la UJC, un espacio en el que los pinareños dialogaron «a camisa quitada», sobre las principales dificultades que atentan contra el adecuado funcionamiento de la organización en este territorio.
«Basta ya de incorporar a jóvenes por cumplir con las cifras; hay que enfocarse en crecer con quienes realmente se sientan comprometidos con esta militancia, con la Revolución y con las tareas que esta nos asigne», manifestó el secretario del comité de base del campismo Dos Hermanas, quien se desempeña como técnico de recreación.
Fueron certeras sus palabras cuando aseguró: «De ahí la relevancia de crear espacios de reunión que permitan interactuar, conocerse los unos a los otros y compartir sus experiencias». En tal sentido Diosvany Acosta Abrahante, miembro del Buró Nacional de la UJC, exhortó a generar propuestas que logren un verdadero cambio de mentalidad en el universo juvenil.
Necesitamos garantizar una mayor incorporación a las filas de la UJC y ello es una de nuestras prioridades de trabajo; pero no se trata de hacerlo por cumplir una cifra, sino para encontrar entre todos soluciones creativas y actuar como la vanguardia que es la organización de las nuevas generaciones, señaló.
«Otro de los aspectos medulares, diría yo, es que debemos demostrar en cada espacio que la juventud no está perdida, y que sí nos interesan los problemas del país, nos preocupamos por participar activamente en los trabajos voluntarios, las acampadas, los matutinos especiales y en todas las actividades que convoca la UJC», manifestó la estudiante de preuniversitario Daimarys Arteaga.
«Quienes ejercemos como trabajadores por cuenta propia, por ejemplo, tenemos que estar más preparados, conocer de nuestro pasado, la situación actual del país… porque en muchas ocasiones interactuamos con turistas quienes nos preguntan sobre cómo se vive en Cuba, y ahí es cuando debemos plantearles los argumentos para defender nuestra verdad», comentó Lisandra Arencibia Llanes, quien desde hace cuatro años labora en el sector no estatal.
En cada uno de los criterios expuestos en la asamblea de balance se evidenció, como decía Acosta Abrahante, que estos son tiempos de implementar, multiplicar y socializar con todo el universo juvenil, y sobre todo entender que el comité de base es una pieza esencial en el empeño por fortalecer la vida interna, estructuras y quehacer de la UJC.
