El mandatario cubano recorrió también el hospital Agostinho Neto. Autor: Estudios Revolución Publicado: 29/11/2018 | 10:56 pm
GUANTÁNAMO.— «En Guantánamo, que todavía conserva las huellas de Martí escalando sus lomas y de Fidel siguiéndole los pasos, vamos tocando el alma de Cuba y las manos que la sostienen», expresó el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en las conclusiones de la visita que durante dos días encabezó en Guantánamo y que según reiteró, no se trata de un examen de control, sino de la materialización de un sistema de trabajo que consolide un Gobierno consagrado al bienestar del pueblo.
Al término de varios recorridos que lo llevaron en cada sitio al contacto directo con el pueblo, el mandatario cubano dijo que «el mejor tiempo que debe aprovechar un cuadro es el que dedica a la base, que es donde se gestan los procesos y es donde se ve la diferencia entre lo que se sueña o lo que se proyecta y lo que en realidad se concreta», dijo .
«Así es como podemos aprender del pueblo, socializar experiencias de las diferentes provincias, destrabar los problemas que puedan estar frenando el desarrollo de los territorios, o pasar a la agenda de trabajo de las reuniones del Consejo de Ministros. A la base no se va a marcar tarjeta, sino a dejar huellas, y se deja huella cuando se dialoga con los trabajadores sobre los problemas», recalcó Díaz-Canel.
«En Maisí se ha hecho mucho después del paso del huracán Matthew, pero hay que resolver el asunto tan sensible de los subsidios pendientes, y así dondequiera que la gente ha sufrido el embate de la naturaleza», ejemplificó el Presidente cubano.
En presencia, además, de 11 ministros o jefes de Organismos de la Administración Central del Estado, diez viceministros, y los principales dirigentes del Partido y el Gobierno en el territorio, Nancy Acosta Hernández, presidenta del Gobierno en Guantánamo, informó sobre el comportamiento de los principales indicadores económicos de la provincia al cierre del mes de septiembre.
Al puntualizar cada información ofrecida por los diferentes grupos de trabajo que lo acompañaron en el territorio, nuestro Presidente puntualizó un grupo de decisiones que en lo esencial contribuirán a desatar trabas para potenciar el desarrollo del territorio más oriental de la Isla, y entre las cuales está la obligación de las entidades nacionales o de otras provincias a las que Guantánamo aporta ingresos, de retribuirle en lo inmediato el uno por ciento de lo que reciben. También indicó la necesidad de que el territorio cuente con una fábrica de pienso para que avance la producción avícola y no existan obstáculos para la exportación de carbón vegetal.
El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros orientó el apoyo al territorio para concretar todas las posibilidades de exportación que posee y destrabar todo lo que pueda frenar la comercialización de sus producciones.
«Estuve en la fábrica de válvulas y bombas, y allí la directora, que es una mujer batalladora, nos mostró cómo, después de cumplir sus producciones fundamentales, aprovechan toda la materia prima, la recortería incluso, y fabrican bisagras, palas, picos, carretillas, vagones, y medios de trabajo que muchas veces se importan, y ellos, sin embargo, los tienen ahí sin salida», comentó Díaz-Canel.
«Hay que hacerlo todo bien, como merece nuestro pueblo trabajador. Ese es el mejor trabajo político que puede hacer un dirigente para no dejar espacios que sean aprovechados perversamente por los enemigos de la Revolución», sentenció.
En el imperio del mueble y el reino de la sensibilidad
«Es la calidad lo que hace de esta una fábrica muy prestigiosa», dijo el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros en el intercambio con trabajadores de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Muebles Imperio, como parte de la visita gubernamental que durante dos días realizó a Guantánamo.
Acompañado por Rafael Pérez Fernández, miembro del Comité Central del Partido y su primer secretario en Guantánamo, y Nancy Acosta Hernández, presidenta del Gobierno en el territorio, el Presidente cubano estrechó las manos de cada obrero, jóvenes en su mayoría, al pie de los renovados equipamientos que, fruto de una reciente inversión, inyectaron modernidad, eficiencia y calidad a sus producciones.
Fue particularmente afectivo el diálogo en el departamento de tapicería, donde las mujeres imponen su pericia de costureras. A ellas Díaz–Canel instó a seguir llevando la voz cantante para que la entidad continúe garantizando el mobiliario que se destina a las más lujosas instalaciones turísticas del país.
También en la jornada del miércoles, al filo de las seis de la tarde y con las emociones que desatan los encuentros fuera de programación, estudiantes y profesores de preuniversitario y de la enseñanza técnica del complejo educacional José Marcelino Maceo Grajales, «asaltaron» al Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros cuando iba al encuentro con jóvenes que se forman en la escuela pedagógica de la provincia.
Muestras recíprocas de simpatía y de compromiso para conservar la educación como una de las más importantes conquistas revolucionarias, sobresalieron en esos intercambios, en el que también participó la ministra del ramo, Ena Elsa Velázquez.
El mandatario cubano escuchó hermosas historias de vida que llevaron a los futuros educadores a escoger la profesión en la que se preparan a partir de 9no. grado durante cuatro años, una experiencia en la que se forman para impartir docencia más de 26 000 jóvenes de todo el país.
Hecho a mano
El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros inició la segunda jornada de la visita de Gobierno a la provincia de Guantánamo por la UEB Herramientas de Mano, de la Empresa de Válvulas y Bombas, donde fue acompañado por Alfredo López, ministro de Industrias.
La entidad está aquejada de obsolescencia tecnológica y limitaciones de las materias primas. El mandatario visitó varios talleres de la factoría, e intercambió con los directivos y trabajadores sobre la diversificación de sus producciones y la necesidad de que, a través de mayores encadenamientos productivos, pueda acceder a materias primas dentro del país.
Los exhortó a dar a conocer ampliamente sus surtidos y así evitar que lo que ellos hacen sea importado por otras empresas debido al desconocimiento de que aquí se fabrican.
El segundo punto de la jornada Díaz-Canel lo dedicó al análisis de la cadena de impagos y el robo de combustibles, en reunión en la sede del Gobierno provincial, donde participaron varios ministros, viceministros, directivos nacionales y locales y las principales autoridades del territorio.
Según se informó, al cierre de septiembre la provincia acumulaba más de 306 millones de pesos por cobrar y más de 338 millones por pagar, una extensa cadena de impagos que afecta la economía de la provincia y los servicios a la población.
El mandatario llamó a eliminar estos procesos no de forma administrativa, sino a través de la lógica natural de las relaciones financieras entre las empresas, lo que exige además conciliación, cierres y depósitos diarios de los ingresos, y chequeo sistemático por parte de los cuadros de cada empresa, pues detrás de estos fenómenos lo que se esconde es el robo, dijo.
En los mismos términos se refirió a la sustracción de combustible. La esencia de nuestro sistema social es resolver los problemas de la gente, los problemas sociales y la economía del país, y eso tenemos que defenderlo, subrayó.
En la noche del miércoles, el Jefe de Estado recorrió salones del hospital general docente Dr. Agostinho Neto, e intercambió con personal de la institución. El eje de la visita fue la atención al embarazo, a propósito de los índices de mortalidad infantil en la provincia, situados por encima de la media nacional.
En este, el principal centro médico del territorio, con más de 830 camas y 27 especialidades médicas, Díaz-Canel conversó con pacientes y galenos sobre el tema y la atención general que se brinda en el centro. Al final de la estancia, atendió quejas y preocupaciones puntuales de la ciudadanía y orientó analizar las problemáticas.
En el centro de la ciudad visitó instituciones culturales y caminó por el bulevar, donde fue seguido por una multitud que lo esperaba para conocerlo personalmente y saludarlo.