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Un acercamiento al tema desde Villa Clara confirma que abundan los morosos, esos a quienes hay que «caerles» literalmente «atrás» para que abonen. Autor: Adán Iglesias Publicado: 21/09/2017 | 05:40 pm
Un nuevo sistema para la automatización del Control y Gestión de Multas (CGM), con actualizadas prestaciones tanto para los organismos impositores como para los implicados se halla en fase de implementación y generalización en todo el país, informa ACN.
La aplicación fue creada por un colectivo de ingenieros del Centro Territorial Palma Soriano, unidad empresarial de base División Santiago de Cuba, de la Empresa de Aplicaciones Informáticas (Desoft), con la guía del ingeniero Julio César Herrera Soria, detalla el periódico Granma.
Sometida a prueba desde hace un año en los municipios capitalinos de Centro Habana, Habana Vieja, Habana del Este y Regla, fue extendida posteriormente a las provincias de Mayabeque y Camagüey y atendiendo a sus resultados positivos, en los próximos días comenzará su generalización en los restantes territorios del país.
Uno de sus creadores, Julio César Herrera Soria, dijo que tiene como antecedente al conocido por Garux, el cual nació en la misma entidad y ha funcionado en las oficinas de control y cobro de multas del país, pero con un alcance local y otras limitaciones para lograr la integración de la información.
Ahora cserá posible gestionar todas las multas que sean impuestas en la Isla por la Policía Nacional Revolucionaria, el Tribunal Popular, el Cuerpo de Guardabosques, la Dirección Integrada de Supervisión y demás organismos facultados, excepto las de la Oficina Nacional de Administración Tributaria (ONAT) y ya no será necesario archivar la matriz de las multas cobradas, cuya pérdida ocasionaba serias dificultades. Además, el proceso registra la ruta del talonario desde su asignación al organismo hasta el destino de cada talón foliado.
Otro nuevo valor de este sistema es que al tratarse de un servicio brindado por Desoft, los organismos acogidos no requerirán de servidores para hospedar la aplicación, ni del recurso humano destinado a facilitar el soporte necesario, a la vez que su información dispondrá de una mayor seguridad.
