Diversos medios para los laboratorios de ciencias de las secundarias básicas no pudieron adquirirse debido al bloqueo. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:56 pm
Las pérdidas por concepto de flete y transportación de los insumos necesarios para los centros educacionales cubanos ascendió a 928 600 dólares, 100 000 dólares más que el año anterior, evaluando el período de marzo de 2013 a abril de 2014.
El dato fue dado a conocer por el Doctor Lisardo García Ramis, director del Instituto Central de Ciencias Pedagógicas, en una conferencia de prensa realizada este viernes.
Si estas mercancías se pudieran adquirir en regiones del sur de Estados Unidos y movilizarlos desde puertos de la Florida, entonces el costo total sería muy inferior. Además, no podemos aplicar el régimen de consignación, porque corremos altos riesgos de que las firmas distribuidoras realicen alianzas con distribuidores de Estados Unidos y nos congelen los pagos, señaló.
El destacado pedagogo argumentó que, al realizar las compras en mercados lejanos, fundamentalmente en la República Popular China, y para garantizar que los insumos estén en el momento que se necesitan en nuestro país, deben traerse con mucha antelación, lo cual también complica el almacenamiento en Cuba y ello aumenta los costos.
«Con los gastos adicionales por concepto de flete —resumió—, pudimos haber adquirido los tableros magnéticos requeridos por la Educación Especial para la atención de alumnos con trastornos auditivos, los medios didácticos para el desarrollo de habilidades prácticas e intelectuales en más de 500 círculos infantiles, así como los recursos para el mantenimiento de los sistemas hidráulicos de los centros docentes del país».
También el bloqueo trae consigo afectaciones monetario- financieras —subrayó—, debido a la imposibilidad de utilizar el dólar estadounidense en las operaciones del comercio exterior cubano. «Por cambio de moneda e intereses bancarios, en los pagos realizados desde Australia, México, Namibia, Guatemala, Ecuador y Tanzania, se han dejado de ingresar más de 15 973 dólares, así como existe rechazo de algunos bancos extranjeros a realizar pagos a entidades bancarias cubanas».
Entre otras afectaciones, el experto mencionó los obstáculos al intercambio científico pedagógico entre docentes e instituciones pedagógicas de ambos países, a la participación en eventos científicos y culturales, y al acceso a literatura norteamericana.
En este sentido puntualizó que la enseñanza del idioma inglés se afecta por no poder adquirir laboratorios y libros de texto.
«El bloqueo es algo más que afectaciones y hechos aislados. Es una política agresiva de impacto sobre la gestión general de la educación, que limita sus posibilidades por la afectación a otras esferas del país», definió.
Entre otros recursos que no se pudieron adquirir y con los cuales mejoraría el aprendizaje de los estudiantes, señaló la adquisición de máquinas y herramientas para los institutos politécnicos, así como de laboratorios para la enseñanza de la ciencia en los planteles de Secundaria Básica, los cuales no se han podido llevar aún a todos los centros del país.
De manera especial destacó las severas dificultades con las computadoras y la adquisición de piezas para su reparación o sustitución, así como en la producción de software educativos.
El Doctor García Ramis precisó que por el costo de los insumos que requiere, la Educación Especial es la más afectada, y puso como ejemplo que en el mercado norteamericano el costo de las máquinas Braille, imprescindibles para el aprendizaje de los niños ciegos, es de 300 dólares, pero debido al bloqueo el Gobierno cubano tiene que comprarlas en terceros países, a un precio que oscila entre los 800 y los mil dólares.
«Es un tema muy sensible, duro, y no tiene otra manera de llamarse que un atentado a la educación de los niños y niñas cubanos. Contra ello hay que levantar la voz y la opinión pública internacional, porque está en las manos del Presidente de Estados Unidos que se elimine».