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SAN JUAN Y MARTÍNEZ, Pinar del Río.— Con vistas a generar y establecer las bases científico-técnicas para el óptimo desarrollo de la cadena productiva de la aromática hoja con eficiencia, eficacia y sostenibilidad, la Estación Experimental del Tabaco de esta provincia realiza tres investigaciones sobre cómo mitigar el efecto del cambio climático en la producción de la solanácea.
Según informó Betty Hernández García, especialista principal del centro, dicha línea de trabajo implementa un proyecto sobre el impacto del ozono en las plantaciones.
«Las consecuencias aumentan por año: manchas en la hoja y disminución de la resistencia al estrés. Gracias al estudio podemos determinar cuáles son las mejores sustancias para revertir el fenómeno, así como otras acciones para preparar el sembrado en aras de amortiguar los daños, como mojar las raíces y realizar aplicaciones a nivel de hoja, entre otras», añadió.
La investigadora auxiliar resaltó la incorporación de dos nuevos proyectos vinculados a la pesquisa de variables claves para enfrentar las consecuencias del cambio climático, como el corrimiento de cosecha.
Bajo tales fines efectúan sendos experimentos con la siembra tardía en los meses de febrero y marzo para identificar cómo se comporta el cultivo en caso de un traslado temporal del inicio de la zafra, como el sucedido recientemente.
«En dependencia de ello podemos definir las mejores épocas para el trasplante según las condiciones pinareñas, así como establecer o no la posibilidad de segundas siembras», explicó la experta.
Hernández García destacó que en todos los proyectos en curso se establecen líneas por las cuales tributar al aminoramiento del fenómeno ambiental en la producción tabacalera, objetivo fundamental de estudio en la institución.
Los primeros resultados científicos permiten definir sustancias para aplicar y patrones de comportamiento por temporada, datos que se socializan en el sector campesino de Vueltabajo, principal beneficiado con la labor de la instalación.
