Los jóvenes han estado presentes en todos los momentos trascendentales del país. Autor: Roberto Ruiz Espinosa Publicado: 21/09/2017 | 05:43 pm
La Unión de Jóvenes Comunistas creció en 2013. Lo hizo en lo cualitativo y lo cuantitativo, aunque existen muchos desafíos por enfrentar. Fue un año de mucho andar en el propósito de fortalecerse como organización política de vanguardia, no solamente para sus militantes, sino para toda la juventud cubana.
Fueron 12 meses de ajetreo hacia lo interno y en su interacción con la sociedad. Especial atención se dedicó a los comités de base, núcleo de la organización, para que su funcionamiento dejara atrás rutinas que nada tienen que ver con los jóvenes y su tiempo.
La UJC encabezó homenajes a Martí, los estudiantes de Medicina, los héroes y mártires de la Patria y muy conmovedoras fueron las jornadas de cariño, admiración y respeto por el Comandante Hugo Chávez Frías, tras su desaparición física. Para mantenerlo siempre con los jóvenes, el homenaje devino proyecto juvenil denominado Los amigos del amigo, que los 28 de cada mes se celebra en el complejo Morro-Cabaña.
A las provincias orientales, en particular a Santiago de Cuba, los jóvenes militantes se fueron como el brazo fuerte después de desastres naturales, mientras que en todo el archipiélago anduvieron como vigías de lo que en las calles de Cuba debe andar bien. También estuvieron en sintonía con el proceso de actualización económica. Y en Ecuador, junto a representantes de la juventud progresista del mundo, protagonizaron diez días en defensa de la Revolución Cubana, por la unidad, las transformaciones sociales y contra el imperialismo.
De esa agenda múltiple y diversa que tuvo la UJC el año pasado, y de los planes y retos para 2014, dialogaron con el diario Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria de la organización en el país, y sus homólogos en las provincias de Santiago de Cuba, Villa Clara y La Habana.
«Hemos estado inmersos en transformar nuestros documentos rectores —detalló Yuniasky—, porque después de la Primera Conferencia del Partido fue importante decidir la actualidad de algunos de estos. También se trabajó en un nuevo reglamento de las organizaciones de base, así como de los movimientos juveniles y organizaciones estudiantiles».
«La juventud está en todo», afirmó Yasser Hurtado Chinea, primer secretario de la UJC en Villa Clara, quien resaltó la prioridad que resulta para la organización atender a todos, más allá de la militancia y sus comités de base.
«Este enfoque se ha traducido en mayor influencia de la UJC para involucrar a los jóvenes, sin distinción, en el quehacer económico, social y político del territorio», argumentó Hurtado Chinea y citó el fortalecimiento de las organizaciones estudiantiles y movimientos juveniles, como las brigadas técnicas y el martiano.
«Tenemos comités de base más activos que enfrentan las dificultades de sus centros de producción, prestación de servicios o educativos. A partir del ejemplo de la militancia, incitan a lograr que cada cual haga lo que le corresponde. Todavía no se marcha como debe ser, pero se ha progresado hacia esa meta de lograr la eficiencia y la entrega con amor por lo que se hace», dijo.
El dirigente juvenil en Villa Clara afirmó que la militancia creció en comparación con otros años, lo cual muestra el interés de la juventud de ingresar a esta vanguardia. Su provincia, junto a La Habana, es la que más militantes ingresó en el sector del trabajo por cuenta propia.
Para los jóvenes comunistas de Santiago de Cuba también ha sido un año de actividades internas de la organización. Igualmente pueden mostrar resultados satisfactorios. Prueba de ello la dio el primer secretario de la UJC en el territorio, Jorge Pérez Suárez, cuando anunció el crecimiento en las filas, algo que allí no se lograba hace 14 años.
La Habana no se quedó atrás. Yuniel Báez Pedrera, primer secretario del Comité Provincial de la UJC en la capital, señaló que se logró un trabajo integral de todos los factores, lo que llevó a que la UJC asumiera las tareas con mayor dinamismo y rescatara otras que años atrás lograron la identificación de los jóvenes con su accionar.
Congreso y festivales
Los eventos de 2013 mantuvieron en vilo a los jóvenes. Primero el VIII Congreso de la FEU movió a la UJC de todas las provincias durante meses de los que aún se habla. El intercambio de experiencias de los universitarios cubanos fue una revisión para toda la juventud en este año, en que la FEU experimentó cambios con la unificación de las principales universidades del Ministerio de Educación Superior, Cultura Física y el Mined en la Isla de la Juventud, Mayabeque y Artemisa.
«En el Congreso, los jóvenes universitarios se replantearon cómo deben ser sus dirigentes estudiantiles y cómo aligerar sus estructuras para volverlas más frescas, viables, flexibles, menos burocráticas y más cercanas a la realidad joven. Hubo participación desde la base en decidir cómo querían su organización, cómo aportar más a la Revolución, a la FEU y la institución», comentó la Primera Secretaria de la UJC en el país.
Expresó que abundaron los planteamientos sobre la enseñanza del Marxismo-Leninismo y de la Historia, como una de las principales críticas que recibió la educación cubana. Se discutió además sobre la importancia de participar en las redes sociales para poseer vías de comunicación entre los universitarios del mundo. Otros elementos abordados fueron las condiciones de las residencias estudiantiles y el protagonismo de la FEU en estas.
El Primer Secretario de la UJC en Santiago de Cuba destacó la atención que se ha dado a las inquietudes iniciales y cómo el Consejo de la FEU de la provincia se reunió nuevamente en la etapa final del año para atender asuntos pendientes. «Ese proceso no ha muerto y se continúa revitalizando», enfatizó.
Yuniasky Crespo explicó que este seguimiento se ha llevado desde la dirección del Partido y del Buró Nacional de la UJC, a partir de lo planteado por el General de Ejército Raúl Castro Ruz de no dejar en letra muerta los acuerdos.
Los jóvenes artistas de la Asociación Hermanos Saíz también tuvieron su Segundo Congreso, calificado por la dirigente juvenil como la antesala de lo que sucederá con la Uneac, y visto como el escenario principal donde ellos reclamaron su espacio para la creación, presentaron sus insatisfacciones y dieron vías para resolverlas.
Otro evento que sigue dando de qué hablar entre los jóvenes cubanos es el XVIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes. Y no solo por lo que hicieron los muchachos de la izquierda del mundo en Ecuador, sino porque el movimiento en Cuba con vistas a la participación en el evento inició esta vez desde los comités de base, y dejó huellas en todo el país.
«En más de mil centros villaclareños se realizó el Festival y luego en el de la provincia afloró nuevamente el protagonismo juvenil con la gran participación popular que existió», comentó el Primer Secretario.
Según opinó el máximo dirigente de la UJC santiaguera, este evento demostró cuánto se puede hacer.
«Las bases desarrollaron un amplio proceso político en torno al Festival. Por primera vez hubo Festivales provinciales y en los centros, donde no solo seleccionaron a quienes asistirían al encuentro en Ecuador, sino que dieron ideas sobre lo que se haría allá. Este hecho nos servirá como antecedente para otros propósitos que acometa la UJC», reafirmó por su parte Crespo Baquero.
Militancia sin rutina
Este año, un motivo impulsó el accionar de los jóvenes comunistas cubanos. «Era necesario que se dedicaran a participar y fueran protagonistas de nuestra obra. Por eso se le dio un enfoque integral a las organizaciones de base», argumentó la Primera Secretaria de la UJC.
«Para que ser militante no se convierta en una rutina, tenemos que borrar de la mentalidad de los jóvenes el cliché de que la membresía solo se dedica a reunirse y a cotizar la cuota que les corresponde. A veces es una barrera que hace que los que ven desde afuera perciban una organización anquilosada y sin movimiento. Hemos querido lograr armonía entre la vida interna y externa de la UJC», expuso Yuniasky Crespo.
La dirigente resaltó lo provechoso que fue para este verano y para el resto de las actividades, que las instituciones de recreación y capacitación recibieran ideas desde la UJC para lograr propuestas más cercanas a los jóvenes.
En Santiago de Cuba, el plan para el verano 2013 unió en actividades comunitarias a la AHS, la Brigada José Martí de Instructores de Arte y otros movimientos juveniles. La FEU organizó intervenciones comunitarias en barrios complejos de la provincia, con gran acogida de sus pobladores.
«Este año nos demostró que se pueden hacer muchas cosas en la vida externa de la organización, y tenemos que llegar a más espacios, realizar asambleas abiertas en centros de producción y servicios donde hay futuros militantes y un amplio universo juvenil que tiene reservas en el sector campesino, de la industria y la salud. Debemos fortalecer la política de cuadros, sobre todo en las organizaciones estudiantiles», comentó el Primer Secretario de la organización en la Ciudad Heroína.
«Esta es una mirada diferente y ha posibilitado una juventud más fortalecida. Hoy sumamos más miembros que el año anterior, con más organizaciones de base y más jóvenes que quieren pertenecer», ilustró Crespo Baquero.
En la capital, el trabajo se distinguió, entre otras actividades, por la realización del proyecto juvenil Fresa y chocolate, que se extendió, junto a Carnavaleando, a 15 comunidades. El Primer Secretario de la UJC en esa provincia apuntó que se realizaron otras acciones —con los más pequeños como protagonistas— en barrios, casas de niños sin amparo filial y centros penitenciarios, adonde también llevaron el proyecto Acércate más, convenio de la UJC con el Ministerio del Interior que junto a la Brigada de Instructores de Arte José Martí y la comunidad tiene el propósito de que los internos se reinserten a la sociedad.
Entre los resultados más impactantes también destacó el inicio del verano en las playas del Este, una de las actividades que agrupó a muchos jóvenes con baile y canto junto al proyecto PMM (Por un Mundo Mejor).
«Además tuvimos el recorrido del grupo Mucho Ruido por centros de la FEEM, la subida a la loma del Taburete, en Artemisa, y los múltiples conciertos, las ferias científicas de los jóvenes trabajadores y, como es tradicional, las marchas del 27 de enero y del 27 de noviembre, que nos permitieron estar más cerca de nuestra Historia», dijo.
El dirigente juvenil agregó que sostuvieron encuentros con el Movimiento Juvenil Martiano en el marco de Diálogo de Generaciones; presentación y venta de libros y publicaciones juveniles; la denominada Feria de naciones con los estudiantes extranjeros que se forman en Cuba, galas culturales con los artistas aficionados, descargas de trova y poesía…
Otra de las características que diferenció al 2013 fue la relación de la UJC con el sector del trabajo por cuenta propia, donde existen más de cien mil jóvenes asociados.
Báez Pedrera señaló que la capital —la que más jóvenes tiene en el sector no estatal de la economía y los servicios— se distinguió por la atención a ese grupo, fueran militantes o no. En La Habana se crearon cinco comités de base para agrupar a los cuentapropistas y a la primera Brigada Técnica Juvenil del país. Destacó que seguirán impulsando la participación de la juventud en este sector y fomentarán los encuentros con esos jóvenes.
«Debemos lograr en ellos capacidad de disciplina consciente para que participen junto al Estado en todas las políticas. Es un proyecto viable, que podrá tener tropiezos, pero hemos trabajado con ellos», explica la máxima dirigente de la UJC en el país, quien resalta que poseen estructuras de dirección tan buenas como las del sector estatal.
Según explicó, los jóvenes cuentapropistas desempeñaron un rol protagónico en los festivales provinciales, pues se refirieron a cómo participar en el proceso de construcción del socialismo desde el trabajo no estatal y se interesaron por hacer la organización más fresca.
«Este sector va naciendo y hemos ido aprendiendo a partir de lo que hacen, porque son jóvenes revolucionarios y hay que darles la posibilidad que tal vez no han tenido por haber estado desvinculados del trabajo o no recibir total atención. Pueden participar en cualquier tarea de la organización y enriquecerla con sus experiencias», afirma.
Combatir con espíritu
El llamado de Raúl en la Asamblea Nacional del Poder Popular en julio pasado, generó respuestas desde todas las direcciones. Los jóvenes comunistas cubanos también tomaron sus medidas. Uno de los plenos de la UJC desarrollados en el año se dedicó a la defensa de la Patria y al enfrentamiento a las ilegalidades y a las indisciplinas sociales.
Opinó Yuniasky Crespo que los jóvenes «debemos atender estos temas. Por tal motivo, durante todo el año se discutieron en los grupos de la FEEM y en las brigadas de la FEU el discurso de Raúl y las acciones que podrían realizarse para combatir estos males.
«A veces esperamos a que las máximas autoridades del país nos digan qué y cómo hacer. Este año se ha dedicado a que las organizaciones diseñen su plan. Tenemos, por ejemplo, una alta responsabilidad frente al fraude académico, porque donde ocurre hay militantes de la UJC y miembros de las organizaciones estudiantiles que lo permiten. En las aulas hubo discusiones muy polémicas», explicó la Primera Secretaria.
«Realizamos un ejercicio nacional con la FEU, los CDR y la FMC, en el que convocamos a dos jóvenes universitarios por barrio a discutir en torno a las indisciplinas sociales e ilegalidades en las comunidades de Cuba, y se logró un efecto interesante. El llamado de Raúl también está formulado a los jóvenes y tenemos que seguir haciendo; no nos podemos cansar», ratificó.
Un «huracán» tras el huracán
Pero las tareas no solo están en ese orden. La solidaridad también es asunto de los jóvenes, como lo demostraron los villaclareños, quienes ayudaron a territorios afectados por ciclones y reafirmaron su posición de pilares en la defensa.
Los santiagueros virtualmente tuvieron que construir una nueva provincia después del paso de Sandy. El Primer Secretario de la UJC en ese enclave oriental recordó que en 2013 fue trascendental la participación de los jóvenes en la recuperación de los daños causados por el huracán.
«La Columna Juvenil 60 aniversario cerró e inició el año con la incorporación de jóvenes de las provincias centrales y orientales del país para trabajar en la recuperación; y la Operación Santiago, integrada por 300 muchachos desvinculados de la vida laboral y estudiantil, se sumó durante tres meses a la lucha epidemiológica», resaltó Pérez Suárez.
Como reconocimiento a los jóvenes y pioneros por su trabajo en este difícil período, Santiago de Cuba fue la sede de las celebraciones centrales por los aniversarios 51 y 52 de la UJC y la OPJM, respectivamente.
Jóvenes a la izquierda
La lucha contra la subversión político-ideológica es la principal prioridad en 2014, confirmó la Primera Secretaria de la UJC. Pero entre las necesidades por las que no descansarán los jóvenes cubanos, además, estará la libertad de los cuatro hermanos que permanecen en cárceles estadounidenses, dijo.
«Con el prestigio internacional que tiene Cuba dentro de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas y la Organización Iberoamericana de Ministros de Juventudes, tenemos que seguir haciendo énfasis en las causas permanentes de Cuba. Lo más importante es la movilización internacional que logremos, porque tenemos relaciones estables con organizaciones de izquierda de más de 150 países.
«Aunque dentro de los colectivos pioneriles y juveniles hay muchos grupos de solidaridad con los Cinco, tenemos que extrapolarlos más a la actividad internacional, intensificarlos en las estructuras estudiantiles». Lograr —explicó— que todos lo sientan como si fuera un familiar cercano el que está en la situación de ellos.
«En el desfile inaugural del Festival Mundial en Ecuador hubo un grupo importante de delegaciones de países como Estados Unidos, Canadá, Alemania, Rusia, Puerto Rico y algunas naciones asiáticas que sumaron a sus causas la liberación de los Cinco. También ocurrió en el Tribunal Antiimperialista. Lo hemos potenciado dentro de la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (Oclae), organización que preside la FEU», enfatizó.
Yuniasky Crespo se refirió a la oportunidad que representó desarrollar el Festival en Ecuador, porque hizo visible para los diez mil jóvenes que participaron, la experiencia de la Revolución Ciudadana que vive esa nación.
«Tuvimos la posibilidad de mostrar los procesos integracionistas que desarrolla la nueva América para lograr la unión política de todos sus países. Esto ha dado la visión de que hay que contar con latinoamericanos y caribeños, porque muchos jóvenes fueron a ver qué ocurría, y escuchar el discurso radical de los principales dirigentes de Ecuador se convirtió en una clase magistral para ellos».
2014 en balance
Cuando 2014 esté llegando a su fin, la UJC realizará un proceso de balance en los comités de base de todas las organizaciones juveniles, pues esto no ocurre desde que en 2010 se realizara el IX Congreso de la UJC. Será pertinente entonces analizar si la implementación de los objetivos de la Primera Conferencia del Partido ha dado fruto en las organizaciones de base.
En Santiago de Cuba se espera este proceso como un reto para evaluar los últimos tres años, y hacer que la UJC se sienta aún más en los municipios. Según anunció el Primer Secretario en ese territorio, será un año para hacer sostenibles los resultados.
El Primer Secretario de la organización en la capital dijo que son muchos los desafíos de este año, entre estos el debate sobre la importancia que tiene construir una sociedad socialista mejor y lograr, desde la participación en las diferentes actividades, que la economía del país sea más sustentable.
«Este será otro año grande para la nueva generación de habaneros, de mucha alegría y trabajo», resaltó el dirigente capitalino.
Yuniasky Crespo explicó que el trabajo de la organización va a centrarse en los principales centros de producción y servicios, y a potenciar el diálogo y debate con los jóvenes en todo lo que se haga.
«También queremos que en el aniversario 52 de la UJC y 53 de la OPJM se replantee lo que nos falta. La prioridad será fortalecer en los jóvenes los principios que defendemos.
«Debemos concentrarnos asimismo en el uso de las nuevas tecnologías. El portal web Soy Cuba, auspiciado por la UJC, aspiramos que sea el más gustado de los jóvenes cubanos, que lo prefieran porque publique materiales frescos, cuestiones inteligentes y polémicas, documentos para la reflexión y el debate, y porque sea atractivo y dinámico.
«Hemos apostado a que nuestros jóvenes utilicen la tecnología en función de la Revolución. Si lo logramos, vamos a hacer más en contra de las ilegalidades, de las indisciplinas sociales, y también en la defensa de nuestros principios, el proyecto social por el que nos decidimos, la Revolución, sus líderes y el legado que nos han dejado.
«No se trata solo del futuro: hay que hablar también del presente. En cualquier lugar son los jóvenes, principalmente, los que están haciendo, y debemos continuar aportando a la construcción de nuestro proyecto».