Papa Benedicto XVI y Raúl Castro sostuvieron un encuentro en el Palacio de la Revolución. Autor: Ismael Francisco Publicado: 21/09/2017 | 05:18 pm
El Papa Benedicto XVI fue recibido en el Palacio de la Revolución de La Habana por el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, General de Ejército Raúl Castro, al filo de las 5:30 de la tarde de este martes.
Con su llegada a la sede del Consejo de Estado cubano el Sumo Pontífice cumplimenta una visita de cortesía al mandatario, que estaba prevista en el programa oficial de su visita a la Isla.
El Santo Padre reconoció este lunes, durante su primera Misa en la Isla, en la Plaza de la Revolución Antonio Maceo de la ciudad de Santiago de Cuba, los esfuerzos de las autoridades cubanas para el éxito del jubileo por los 400 años de la aparición de la imagen de la Virgen de la Caridad y de su visita pastoral a tierra cubana como Peregrino de La Caridad.
El líder de la Iglesia Católica mundial arribó al mediodía de este martes a la pista del Aeropuerto José Martí, en el avión de Alitalia que lo trajo a Cuba en su visita pastoral como peregrino de La Caridad, procedente de Santiago de Cuba.
Jaime Ortega y Alamino, Cardenal de La Habana, lo recibió al pie de la escalerilla del avión junto a la primera secretaria del Partido Comunista en la capital Mercedes López Acea y la encargada de la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista, Caridad Diego.
Al recibimiento acudieron además miembros del clero cubano, como Monseñor Ramón Suárez Porcari, canciller de la Arquidiócesis de San Cristóbal de La Habana y Monseñor Carlos Manuel de Céspedes. Un grupo de niñas y niños vestidos con trajes nacionales le dieron la bienvenida y le obsequiaron flores.
Luego de su arribo su Santidad se dirigió hacia la Nunciatura Apostólica, desde donde partió a su visita de cortesía al Presidente Raúl Castro.
Para esta noche están anunciados un encuentro y una cena con los obispos cubanos y el séquito papal en la Nunciatura de La Habana.
A las 9:30 de la mañana de este martes el Papa Benedicto XVI oró ante la Virgen de la Caridad del Cobre por el bien de nuestro pueblo en su visita al Santuario de la patrona de Cuba.
«Hermanos, he venido como peregrino hasta la casa de la bendita imagen de la Caridad del Cobre, la mambisa —como ustedes la evocan afectuosamente—, dijo Su Santidad a la salida del Santuario a las personas que allí le esperaban con un aplauso.
El Santo Padre afirmó que la presencia de la Virgen en ese poblado cubano «es un regalo del cielo para los cubanos. Y significó que les expresa su saludo a los allí presentes, para que lo lleven por doquier a todos, para que experimenten el consuelo de la fe.
Seguidamente el Sumo Pontífice de la Iglesia Católica reveló sus pedidos a la Caridad del Cobre, cuando dentro del Santuario rezó en silencio y le encendió un cirio.
«Le he pedido por el futuro de su patria, para que avance por el camino de la renovación y esperanza, para el bien de todos los cubanos.
«También he suplicado por los necesitados, por los que sufren privados de libertad, separados de sus seres queridos o pasan por graves momentos de dificultad.
«Además he pedido por los jóvenes, para que sean amigos de Cristo y no escuchen propuestas que los conduzcan por los caminos del dolor y el mal.
«En lo particular, también he pedido por los cubanos descendientes de africanos y los llegados de Haití, pueblo que hoy sufre las consecuencias de un terremoto, y no he olvidado a los campesinos y sus familias que brindan sus casas para leer el evangelio», destacó.
Más adelante el Sumo Pontífice dijo que anima a todos los hijos de esta tierra a edificar la vida sobre la roca firme que es Jesucristo. «Trabajar por la justicia, y que nada ni nadie les quite la alegría interior característica del alma cubana».
En Santiago de Cuba el Papa fue despedido por las principales autoridades de la provincia santiaguera. En la Plaza de la Revolución Antonio Maceo de la Ciudad Heroína ofició una misa multitudinaria.
A las 9:00 de la mañana de este miércoles el Papa celebrará una misa en la Plaza de José Martí de La Habana y en horas de la tarde partirá hacia el Vaticano tras una despedida popular.