La medicina cubana festeja este miércoles el aniversario 40 de la realización exitosa de su primer trasplante renal, considerado por especialistas como otro de los excelentes resultados científicos de esta isla caribeña, reportó PL.
Según cifras oficiales, desde aquella fecha, unas cuatro mil 300 personas han recibido los beneficios de dicho proceder en nueve hospitales de cinco provincias: Ciudad de La Habana, Villa Clara, Camagüey, Holguín y Santiago de Cuba.
Los protagonistas del referido acontecimiento fueron los doctores Oscar Suárez, cirujano, Alfredo Gómez, urólogo, y el grupo básico del Instituto de Nefrología, dirigido por el profesor Abelardo Buch.
Ellos realizaron, de manera gratuita y durante varias horas, el injerto en un joven de 22 años de edad con una insuficiencia renal crónica terminal.
A juicio de expertos, esta enfermedad representa una epidemia mundial y aumenta de 10 a 15 por ciento por año en los pacientes que la padecen, y entre sus causas más frecuentes figuran la diabetes mellitus y la hipertensión arterial.
Actualmente, alrededor de una décima parte de los trasplantes se realizan con órganos de donantes vivos: de padres a hijos, de hijos a padres o entre hermanos.
En Cuba hay tres mil pacientes en hemodiálisis, y por cada uno el Estado invierte anualmente 20 mil dólares, señaló recientemente el coordinador nacional del Programa de Trasplante Renal, Alexander Mármol.
Comentó que en ese tipo de tratamiento, realizado en días alternos en 47 hospitales, se consumen 120 litros de agua por enfermo, durante cuatro horas.
Internacionalmente está demostrado que el trasplante resulta tres veces más económico que mantener al enfermo en diálisis o con riñón artificial, como también se le denomina, remarcó el especialista.
Un trasplante renal puede costar más de 50 mil dólares el primer año, en dependencia del país, y en Cuba ese período está en 11 mil dólares y el segundo año en unos cinco mil, explicó.