El proyecto cubano de universalización de la enseñanza superior ha trascendido las fronteras nacionales y se aplica hoy con éxito en otros países, especialmente en Venezuela, donde ya existen microuniversidades en los 355 municipios de esa nación.
Estas experiencias centraron las intervenciones y debates en una mesa redonda sobre la cooperación para la integración de la Educación Superior, en el contexto del 6to. Congreso Internacional Universidad 2008, que cerrará sus sesiones este viernes.
Ministros de Educación Superior, así como autoridades universitarias y científicas de Venezuela, Surinam, Yemen, Irán, Congo, Angola, Nicaragua, Argentina y Cuba se unieron en la mesa redonda, donde se destacó la importancia de universalizar el acceso a la educación superior y se pusieron ejemplos de su implementación en estas naciones.
Uno de los puntos más debatidos fue cómo concertar estrategias comunes para la convalidación de títulos entre los países, algo pendiente en el proyecto integracionista de la Educación Superior que impulsa Cuba, con miles de estudiantes extranjeros, pero también Venezuela, que prevé formar en los próximos años a miles de médicos en su Escuela Latinoamericana de Medicina, donde ya estudian 498 alumnos de 14 países.
La falta de mecanismos en algunos casos, la poca comprensión sobre esta materia, pero también la resistencia de intereses privados vinculados a universidades y a sectores profesionales, pudieran obstaculizar que algunos graduados ejercieran lo que estudiaron en el contexto de los proyectos de colaboración, advirtieron los panelistas.
Al respecto, el titular de Educación Superior de Venezuela, Luis Acuña Cedeño, explicó que esta situación es compleja, pues los acuerdos de formación no se firman solo con gobiernos, sino incluso con movimientos sociales.
En ese sentido puso como ejemplo que en su país también se están formando ingenieros agrónomos de naciones hermanas como Brasil, gracias a la firma de un convenio con el Movimiento Sin Tierra, mediante el cual se creó el Instituto Agroecológico Paulo Freire, con una matrícula actual de 183 jóvenes de 13 países.