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El acceso a la educación de todas las personas con limitaciones físicas e intelectuales es una conquista y prioridad de la Revolución cubana, que desarrolla la enseñanza especializada para los ciudadanos que la precisan.
De acuerdo con la AIN, en la Isla existen más de 400 escuelas especiales con métodos adecuados a las posibilidades de sus alumnos, tales como el lenguaje de señas en el caso de los sordos; y el sistema de lecto-escritura Braille para los ciegos, elementos que son empleados en toda la geografía cubana.
También están vinculados a centros docentes aquellos con doble discapacidad, como los sordociegos, de los cuales asisten a las aulas más de 140 niños y jóvenes en todo el país.
Otro avance significativo en los últimos tiempos es la continuidad de estudios de esas personas en las enseñanzas preuniversitaria, técnica y superior y su incursión en especialidades antaño vedadas para ellos, como la informática, artística y la agropecuaria.
Mas la atención a estas personas incluye un trato más personalizado y afectivo, ejemplificado, entre otras iniciativas, en el movimiento de pioneros rehabilitadotes, programa que cuenta con mil 200 miembros en todo el territorio nacional, y que consiste en que niños y jóvenes cooperen con la Asociación Nacional del Ciego (ANCI) para la plena integración social de los discapacitados visuales.
Explica este medio que como parte de ese proyecto, los estudiantes de la enseñanza primaria y secundaria apoyan a las personas ciegas y de baja visión en la movilidad, el adiestramiento en algunas técnicas y la información, mediante la práctica de ejercicios y la lectura de la prensa y otros materiales en talleres especiales, bibliotecas y en sus propios hogares.
La Asociación y los cerca de dos mil afiliados que reciben los beneficios realizan además actividades conjuntas por los aniversarios de la Organización de Pioneros José Martí y la ANCI, así como por el Día de los niños, el tercer domingo de julio, y el Internacional de los discapacitados, el tres de diciembre.
Asimismo, el convenio de trabajo entre ambas organizaciones contempla un concurso de artes plásticas y literatura, denominado El bastón blanco, al que pueden enviar sus obras pioneros de toda Cuba acerca de la lucha por la rehabilitación de ese sector de la población, concluye este medio.
