Frente al espejo
Yunet, Acabo de leer tu trabajo. (Estampas de la más joven, Yunet López, 8 de enero). Muy interesante, porque contribuye a despertar o fortalecer el amor por nuestro terruño, pero debo señalarte un error: el Congo es de Catalina de Güines, no de San José de las Lajas. Sugiero se haga una fe de erratas; rectificar es de sabios y los lectores no deben quedar con ese error. Continúa realizando trabajos sobre nuestra joven provincia, para que se conozcan todos sus valores. (Ibrahim González)
El surgimiento, confección, venta y promoción de las butifarras del Congo constituyen orgullo tradicional del menú de los vecinos de Güines. Por su gusto y calidad, fue conocido nacional e internacionalmente, y ampliamente divulgado mediante la canción Échale salsita, de Ignacio Piñeiro y su Septeto Nacional.
Guillermo Armenteros, conocido por el sobrenombre de «el Congo» desde su infancia, fue natural de esta zona, y provenía de una familia humilde dedicada al corte de caña. Era de mediana estatura, sencillo, jaranero, dicen que bien parecido, y se calcula que haya nacido en la última década del siglo XIX. Las butifarras comenzaron a hacerse en 1955, y se vendían en las fiestas, frente al actual restaurante que mantiene el nombre de El Congo. (…) Al principio el Congo vendía el codiciado producto que estaba ubicado dentro de una cesta, la cual se colocaba sobre su cabeza, situado en sitios cercanos a los bailes y fiestas públicas, religiosas. Durante sus gestiones de venta pregonaba la palabra: ¡Salsa! Todos los comensales coincidían en que era un plato exquisito. (Rafael Rodríguez)