Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

«José Alejandro Rodríguez: Hace tres meses resido en Estados Unidos. En Cuba siempre leía su columna, y aquí lo hago de igual manera a través de Internet. ¡Cómo extraño mi periódico!, aunque pasaba un trabajo “del caraj...” —perdone la expresión— para conseguirlo. A veces me regalaban los ejemplares con semanas de atraso y con qué placer los leía... ¡Cómo extraño mi patria querida! Este país te aplasta, te pone las neuronas a punto de explotar... ¿Cómo es posible que abandonemos la familia por una pesadilla? Siga escribiendo: a través de usted vivo Cuba. Muchas cosas buenas para este 2009 para usted y su familia». (Avelino Castro)

«Felicidades de todo corazón por el buen reportaje realizado sobre el pelotero camagüeyano Rafael Ayala (Ayala batea sin country ni «jailáif», Yahily Hernández Porto, 9 de enero). Nos gustaría sugerir que su crónica sea leída en las escuelas deportivas del país, ya que es muy importante que nuestros niños y jóvenes deportistas conozcan todas las dificultades y el racismo que había en Cuba antes del triunfo de la Revolución.

«Tiene mayor valor el testimonio cuando es contado por una gloria deportiva de Camagüey y de Cuba como es Rafael Ayala Freyre, quien sufrió en carne propia el racismo y a pesar de ser un gran deportista se vio precisado a ingresar en el ejército, donde estuvo siete años, jamás maltrató a ningún ciudadano y a petición de algunas madres camagüeyanas salvó a muchos jóvenes detenidos en los cuarteles de las garras de los chacales.

«Ayala fue, además, buen amigo y compañero del revolucionario Cándido González, ayudante de nuestro Comandante en Jefe Fidel en la expedición del Granma y en el desembarco en playa Las Coloradas, caído heroicamente.

«Formidable es también que el artículo se haya adentrado en la marginación de los pobres, pues Romelio “Pupy” Santiago y yo mismo, aunque somos blancos, fuimos discriminados por ser pobres, y gracias a la Revolución somos glorias del deporte de Cuba —en el boxeo— y la representamos dignamente en diferentes lugares del mundo y en varias ocasiones en los propios Estados Unidos. Muchas felicitaciones de todo corazón». (Waldo y «Pupy» Santiago)

«Querida Mileyda: Me llamó mucho la atención que escribieras sobre la experiencia primera de los adolescentes varones en las relaciones sexuales (El debut de los Adanes, Mileyda Menéndez Dávila, 10 de enero), pues es cierto que de lo que más se habla es de las muchachas. Gracias por tan maravilloso artículo. Siga creando para bien del público que espera cada edición de esta sección tan importante y renovada que es Sexo Sentido (página temática de los sábados)». (Andres López Rondón)

«Estimados Rufo y Joel: Les escribo para hablar de algunas cosas. Primero, sería bastante saludable para el enriquecimiento de los cinéfilos cubanos que se distribuyeran y se promocionaran más las películas latinoamericanas y en especial de Cuba. En un tiempo pasado la única película cubana que me fascinaba era La Bella del Alhambra, con la siempre bella Beatriz Valdés, pero al pasar el tiempo y apreciar películas como La pared, Páginas del diario de Mauricio, Perfecto amor equivocado, Viva Cuba, Lucía, Amada y otras nos damos cuenta de que las temáticas que abordan son muy contemporáneas y poseen un mensaje que llega desde el punto vista ya sea del humor o del drama.

«Lo otro es que no sé hasta qué punto será válida una crítica a una película, un programa o un video- clip... Pienso que el mejor crítico es el público, que casi siempre es el que descifra el propósito, la intención del autor. Sin más, un defensor de la cultura cubana». (Daniel)

Y aunque dejo la puerta abierta para que los colegas Rufo Caballero y Joel del Río emitan su opinión sobre estos temas —si lo estiman pertinente—, quiero saludar el planteamiento de Daniel y decirle solamente que la crítica artística es siempre bienvenida aun cuando no se la comprenda. Todo mensaje tiene su público. Seremos más libres y útiles mientras más se ensanchen nuestros horizontes, y en ello la crítica, y en este caso la artística, juega un papel insustituible. La verdad no es viaje en solitario, sino un destino al que marchamos aprendiendo unos de otros. Terminamos con fragmentos de la carta que nos envió un colega ecuatoriano:

«Saludos y felicitaciones por la crónica de la visita del presidente Rafael Correa a Cuba. Ustedes han sido el único medio de su país que publica datos adicionales a las declaraciones del presidente; eso se llama profesionalidad y reporterismo.

«¿Saben que yo no sabía que Ecuador reanudó relaciones con Cuba en 1979? Eso significa que se mantuvieron rotas por 18 años, pues hubo presiones de la política y los partidos tradicionales, seguidas de una campaña de propaganda dirigida desde la Embajada de Estados Unidos, para que el presidente Arosemena* rompiera las relaciones en 1961. Luego, una junta militar lo echó de la presidencia y el primer decreto castrense fue “Declárase fuera de la Ley al Comunismo”...». (Ángel Gastón Vera, diario La Tarde, Cuenca, Ecuador)