Acuse de recibo
Desde el reparto Inav, municipio habanero de Boyeros, Vania Cabrera García denunció el pasado 29 de septiembre que le cobraron el servicio eléctrico de junio ¡dos veces! Ella paga la electricidad por la aplicación Transfermóvil; pero en junio pasado lo hizo por el ventanillo, pues ya concluía el mes. Y le dieron su comprobante de pago, que conserva. Pero en septiembre consultó su factura, y para sorpresa suya, debía aún junio. Se lo cobraron de nuevo.
Fue a la oficina comercial de la Empresa Eléctrica en Abel Santamaría, y allí le dijeron que con ellos, no tenía deudas, el problema era con el Banco Metropolitano (BM). Se comunicó por teléfono con el BM, y le plantearon que no eran responsables de ello, pues la Empresa Eléctrica es la que pone el fichero para el cobro del servicio. Y ella decía: «Quién me devuelve el dinero que he pagado doble?».
El pasado 14 de octubre respondía Karelia del Portillo Raveiro, jefa del Departamento de Atención a la Población del Banco Metropolitano, que «el cobro de la electricidad es un servicio que el Banco ofrece por cuenta de terceros a la Unión Eléctrica, y los adeudos de sus clientes son responsabilidad de esa entidad. Recomendamos que sea la Empresa Eléctrica de La Habana, Dirección Comercial, la que ofrezca la respuesta correspondiente».
El 28 de octubre pasado, respondió Mario Castillo Salas, director general de la Empresa Eléctrica La Habana (EELH), que las investigaciones hechas por la directora comercial de la EELH arrojaron que «no existía responsabilidad alguna de lo sucedido imputable al Banco Metropolitano; por ende la EELH ofreció sus más sinceras disculpas a esa entidad».
Añade que el 6 de octubre se le devolvió a Vania la totalidad del efectivo cobrado doble, pues ya se encuentran abiertas al público las ventanillas de cobro. Y la cliente quedó satisfecha al ser aclarada su insatisfacción.
Durante la investigación, dice, no se pudo comprobar que un funcionario de la EELH inculpase al Banco Metropolitano de lo sucedido. Y añade que «se realizarán los análisis pertinentes por vía administrativa con el lector cobrador por haber cobrado la cuenta al cliente, sustrayéndola de la ventanilla y no depositando el dinero oportunamente».
Agradezco ambas respuestas, y ruego que la EELH nos dé seguimiento informativo de cuál medida se adopte con quien no depositó a tiempo lo cobrado a Vania, la persona que confió en esa entidad, y merece las mayores disculpas.
Rommel Morell (Calle 64a No. 3301, entre 33a y 41, Playa, La Habana) cuenta que en abril pasado solicitó a Etecsa el Nauta Hogar, y tras muchas gestiones para finalmente mejorar la conexión, resulta que ese servicio se desconecta automáticamente cada cinco horas de estar en uso.
Fue a las oficinas de Etecsa en el Centro de Negocios de Miramar, donde contrató el servicio. Y la funcionaria allí le comunicó que nunca había escuchado sobre ese problema. Luego, le enviaron a casa un técnico, y tampoco sabía del asunto. Más tarde, Rommel recibió un correo de Atención al Cliente, diciendo que eso es normal, que el servicio está programado así.
«Lo que me preocupa, afirma, es que el correo no venía con nombre de la persona que supuestamente me daba la respuesta. Luego hice un último intento y contacté a Etecsa por su perfil en Facebook, pidiendo información. Y la brindada fue totalmente inservible, pues no hay nada publicado oficialmente sobre esta desconexión automática después de cinco horas.
«Me indicaron contactar con el 118, el número al que se debe llamar para algún reporte o dudas sobre el servicio. Y después de una muy buena atención por parte de quien me atendió, me informaron también que nunca han escuchado de esa información, que hasta el momento nunca nadie ha tenido ese problema.
«¿A quién creerle en este laberinto de desinformación por parte de Etecsa? Yo solo quiero saber la respuesta oficial y verdadera, pues uso el Nauta Hogar para asuntos que me obligan a estar conectado por más de cinco horas seguidas. Y lo peor es que me siento totalmente irrespetado por parte de Etecsa al no recibir una respuesta sobre este problema. Tengo los correos guardados y todos los contactos que he tenido con la empresa para recibir información como evidencia de su mala atención al cliente», concluye.
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