Acuse de recibo
«Cuando finalice esta inversión, el poblado de Vueltas contará con un moderno acueducto con una garantía total de servicio y una alta eficiencia», afirma en su carta a esta sección Rigoberto Morales Palacios, delegado del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) en la provincia de Villa Clara.
La misiva de Morales responde a la queja de un vecino de esa localidad, José Miguel Rodríguez Vázquez, publicada en esta columna el pasado 5 de agosto, bajo el título: «¿Qué vuelta con el Acueducto de Vueltas?».
Entonces, José Miguel calificaba de «desastre hidráulico» el estado del acueducto de ese pueblo, planteamiento recurrente en las asambleas de rendición de cuentas del Poder Popular. Y argumentaba que las inversiones hechas en él años atrás no contaron con todos los recursos y condiciones, por lo cual hoy un alto por ciento del agua que se bombea se pierde, por los múltiples salideros que presentan las insuficientes e inadecuadas mangueras que enterraron.
Al respecto, puntualiza Morales que el actual abasto de agua de Vueltas se construyó en 1994, cuando esa entidad no contaba con la fábrica de tubos que tiene hoy, ni se utilizaban las modernas técnicas de accesorios y valvulerías. Por ello, «las redes construidas en aquel entonces no quedaron con la calidad requerida. Y son frecuentes los salideros».
Fue posteriormente, agrega, que se tomó la decisión de proyectar e incluir en el Plan de Inversiones esa obra, así como tubos de polietileno de alta densidad, que es la tecnología más avanzada en el país, para la conductora de 14,2 kilómetros.
Especifica el funcionario que actualmente, para darle valor de uso a la estación de bombeo y a la conductora, concluidas recientemente, se bombean 1,5 horas en días alternos, y al estar en mal estado las redes, se pierde esa agua.
De todos los objetos de obra, consigna, está pendiente el inicio de las redes definitivas, para lo cual está acopiada ya toda la tubería del circuito 1 (60 por ciento del poblado), en espera de los accesorios y valvulería que, luego de importarlos, ya se encontraban en el puerto de la capital al momento de redactar Morales la misiva.
Asegura el delegado del INRH que la situación quedará resuelta definitivamente cuando se concluya la ejecución de las referidas redes, lo cual incluye la sustitución de una parte de lo que se construyó en 1994.
«Por nuestra parte, concluye, visitaremos a José Miguel para explicarle que lo que está ocurriendo hoy allí, no tiene nada que ver con la inversión actual y la terminación del acueducto, que hoy más que nunca está asegurada. Y le aportaremos toda la información que nos solicite sobre el problema planteado».
A más de agradecer la respuesta a Morales, este redactor hace votos porque, con la garantía de recursos y moderna tecnología, se concluya allí un trabajo de respeto, para darle la última vuelta al asunto de ese acueducto. Y para dejar cerrada, prácticamente sellada, la válvula de la insatisfacción popular sobre el tema agua en esa localidad.