El número total de muertes por coronavirus en el país ascendió a 259, y el número total de casos confirmados de infección en China se eleva a 11 791. Conozca todo lo necesario sobre el progreso de contagios y de medidas de control al coronavirus surgido en China
La Comisión Nacional de Salud de China informó que para la tarde de este 31 de enero el número total de muertes por coronavirus en el país ascendió a 259, y el número total de casos confirmados de infección en China se eleva a 11 791.
Además, este viernes se registraron 2 102 nuevos casos confirmados y se reportaron 46 nuevas muertes a causa del coronavirus.
Este 30 de enero, el director general de la Organización Mundial de Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció que el coronavirus 2019-nCoV representa una emergencia de salud pública de preocupación internacional. No obstante, señaló que la organización no cree que el brote haga necesario cerrar las fronteras chinas.
Para impedir la propagación del virus desde las áreas más afectadas, las autoridades chinas pusieron en cuarentena primero a la ciudad de Wuhan y después a otras 17 urbes, con una población conjunta de 56 millones de personas.
De acuerdo con los datos de la Universidad Johns Hopkins (EE.UU.), que está monitoreando la propagación del coronavirus en tiempo real y expone los resultados en un mapa interactivo, los casos de contagios confirmados en otros países son:
Casos de neumonía de etiología desconocida. Esa fue la primera notificación que se le hiciera a la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 31 de diciembre último desde la ciudad china de Wuhan antes de que, de manera lamentable, el reporte de casos similares se extendiera rápidamente por el continente asiático.
La alerta epidemiológica emitida por la OMS se relacionaba con los coronavirus, una extensa familia de virus cuyas puntas en forma de corona en la superficie justifican su nombre. Ahora, el nuevo coronavirus 2019-nCoV ya ha llegado a Estados Unidos, Tailandia, Australia, Singapur, Malasia, Taiwán, Corea del Sur, Japón, Vietnam, Canadá y Nepal.
Precisamente, este jueves Tedros Adhanom Ghebreyesus, el director general de la OMS, anunció que la cepa del coronavirus originada en diciembre en Wuhan representa una «emergencia de salud pública de preocupación internacional.
«La razón principal de esta declaración no se debe a lo que está sucediendo en China, sino a lo que está sucediendo en otros países. […] Nuestra mayor preocupación es la posibilidad de que el virus se propague a países con sistemas de salud más débiles y que no están preparados para enfrentarlo», declaró durante una conferencia de prensa.
Ante el ascenso en el número de fallecimientos e infectados, pero también ante el aumento de información especializada de la mejor calidad, es hora de conocer más de cerca de qué trata la peligrosidad de este virus que ha afectado ya la paz de miles de personas.
Los coronavirus son una extensa familia de virus, algunos de los cuales pueden ser causa de diversas enfermedades humanas, que van desde el resfriado común hasta el síndrome respiratorio agudo severo, semejante a una neumonía grave. Esta familia de virus se descubrió en la década de los 60 y su origen es todavía desconocido.
Gran parte de los coronavirus se pueden tratar de forma eficaz y fácilmente. Expertos apuntan que la mayoría de las personas contraen en algún momento de su vida un coronavirus, usualmente durante la infancia, sin grandes repercusiones.
Al surgir el brote, las autoridades chinas creían que el virus no se transmitía entre humanos, pero desde entonces se han identificado miles de casos contagiados de esa manera. Los científicos observaron entonces que hasta el momento cada persona infectada es capaz de transmitir el virus entre 1,4 y 2,5 personas, esa cifra corresponde a la reproducción básica del virus.
Cuando los niveles de contagio superan el uno el virus es considerado autosostenible, o sea, se reconoce que no se extinguirá por sí solo, y es hora de encender todas las alertas sanitarias; de ahí que China haya activado medidas tan serias como poner en cuarentena a varias ciudades para lograr frenar la propagación.
Pero si con ello pareciera virulenta, esta enfermedad ha demostrado más secretos. Un grupo de expertos del Comité Estatal para la Salud de China, liderados por el doctor Li Xingwang, ha anunciado que el coronavirus 2019-nCoV es contagioso incluso desde una distancia de hasta dos metros y que, además, es posible infectarse también a través de la conjuntiva de los ojos.
«Si el virus está en la piel de sus manos y usted se frota los ojos sin darse cuenta, puede infectarse», explicó el especialista. Otro de los anuncios científicos recientes es que el origen del contagio se produjo de serpientes y murciélagos a humanos, y solo desde entonces, de persona a persona.
Los científicos también indican que los pacientes pueden contagiar el virus aun antes de que los síntomas aparezcan, en el lapso de tiempo entre la infección y la aparición de los síntomas conocido como el período de incubación, que es de entre uno y 14 días.
Otro de los retos que han asumido los expertos, esta vez estadounidenses, ha sido lograr monitorear en tiempo real cada contagio de este coronavirus. La Universidad Johns Hopkins registra constantemente la propagación del coronavirus exponiendo los resultados en un mapa interactivo que demuestra lo que es posible lograr cuando varias disciplinas —en este caso de las ciencias de la información— se ponen al servicio de la misma causa.
Quizá la segunda mayor lucha contra este mal, después de los controles para evitar la propagación, sea la búsqueda, a toda velocidad, de una vacuna. Se trata de algo que ya ha comenzado en China como parte de las extraordinarias medidas que ha tomado el Gobierno de Beijing para contener los contagios.
En el medio chino Diario del Pueblo, un equipo del Centro de Prevención y Control de Enfermedades chino, con la dirección del científico Xu Wenbo, indicó haber logrado aislar con éxito la primera cepa del virus para lograr este propósito, sin que aún haya mayores detalles.
Como demuestran las noticias científicas al respecto, ante este nuevo brote de un coronavirus las respuestas especializadas están teniendo lugar en las áreas imprescindibles de la prevención: la cooperación de ciencias diversas y autoridades, y el intento de curar, a pesar de que los virus solo se tratan de modo paliativo.
Lo que nos sigue asombrando no es solo el dato del crecimiento de contagiados, sino más bien el que apunta a la veloz reacción de la Salud y de otros campos profesionales que colaboran para demostrar que a esta altura del siglo la experiencia cuenta, y mucho.
SRAS-CoV: El síndrome respiratorio agudo y grave (SRAS, también conocido como SARS y SRAG) comenzó en noviembre de 2002 en China, afectó a más de 8 000 personas en 37 países y provocó más de 700 muertes.
MERS-CoV: El coronavirus causante del síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) fue detectado en 2012 en Arabia Saudita. Hasta octubre de 2019 se notificaron más de 2 400 casos de infección en distintos países, con más de 800 muertes.
2019nCoV: A finales de diciembre de 2019 se notificaron los primeros casos. Desde entonces el goteo de nuevos infectados ha sido continuo y se han producido varias muertes. Este virus no parece tan grave como el SRAS ni tan letal como el MERS.