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Ante el efecto intimidatorio de las sanciones económicas de Trumpo, los enemigos de Venezuela se han topado con la respuesta digna y coherente del gobierno bolivariano. Autor: Semana Publicado: 24/03/2025 | 07:07 pm
CARACAS, marzo 24.— El presidente Donald Trump subió otro peldaño en el hostigamiento a la nación bolivariana al anunciar aranceles de un 25 por ciento en cualquier transacción comercial,para los productos de todos aquellos países que compren petróleo y/o gas a Venezuela, lo que imprime un carácter extraterritorial a la guerra económica de EE. UU.contra ese país, y afectaciones a terceros.
La medida estará en vigor desde el 2 de abril, y fue anunciada por el mandatario en su red Social Truth, y justificada por él en razón de «la hostilidad» del país sudamericano.
«Venezuela ha sido muy hostil hacia EE. UU.y a las libertades que propugnamos», escribió Trump, e indicó entre otros «múltiples motivos», el supuesto envío «intencionado y encubierto a Estados Unidos de decenas de miles de criminales peligrosos, incluidos asesinos y personas de naturaleza extremadamente violenta», en alusión a pretendidos miembros del cártel El tren de Aragua.
Más de 230 indocumentados venezolanos están desde la semana pasada en el temible reclusorio salvadoreño conocido como Cecot, adonde fueron trasladados sin procesos judiciales previos, sin que siquiera existan pruebas de que pertenecen al mencionado clan, lo que ha desatado toda una campaña popular en Venezuela por su devolución, y los esfuerzos diplomáticos y políticos del Gobierno por rescatarlos.
La víspera, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció a los gobiernos de EE. UU. y El Salvador por el «secuestro cruel» de sus connacionales, ya que aquellos fueron deportados de manera ilegal a la nación centroamericana, para ser recluidos en una cárcel de máxima seguridad, sin respeto a sus derechos.
«Las acciones de los gobiernos de EE. UU. y El Salvador contra nuestros jóvenes trabajadores constituyen un acto de crueldad e injusticia, un secuestro cruel e indignante. Desde Venezuela, exigimos al Gobierno de los EE.UU. que cese la persecución y violación de los derechos de los migrantes venezolanos», pidió Maduro en un mensaje publicado en sus redes sociales.
Precisamente, AVN informó que otros 199 ciudadanos venezolanos regresaron esta madrugada a su patria, procedentes de Texas y luego de una pausa en Honduras, donde tomaron el vuelo de la aerolínea nacional Conviasa que finamente los llevó de vuelta.
«Son 199 jóvenes, muy jóvenes. Ellos están alegres de regresar a la patria y debemos recordar que el Plan Vuelta a la Patria los ha sacado del infierno porque, solo por tener la nacionalidad venezolana, fueron atacados», afirmó al darles la bienvenida, el vicepresidente de Política, Seguridad Ciudadana y Paz, Diosdado Cabello.
Cabello subrayó la voluntad del Gobierno de localizar a los venezolanos que estén siendo perseguidos, sin importar en qué parte del mundo se encuentren.
«Esta es la cuarta ocasión, el cuarto vuelo, en el cual han venido venezolanos desde los EE. UU., informó. Hoy estamos recibiendo a 199 compatriotas con las mismas condiciones del primer vuelo; saben Venezuela y el mundo que nosotros no somos cómplices de ningún tipo de delito, lo que no vamos a condenar a los venezolanos solo porque esa sea la narrativa que quieren imponer», recalcó.
Cabello también resaltó que entre los venezolanos que han llegado de esta forma al país, ninguno pertenece al Tren de Aragua. Todos han sido revisados en sus antecedentes, dijo, y reafirmó que si llegara alguno solicitado por las autoridades «nosotros seríamos los primeros en informar que ha llegado una persona con antecedentes de pertenencia a una banda», añadió el despacho.
Otro vuelo de Conviasa condujo al país, recientemente, a un total de otros 311 migrantes venezolanos.
El plan Vuelta a la Patria está vigente hace ocho años con el propósito de conducir y dar la bienvenida en el país a migrantes que, en su gran mayoría, buscaron otros destinos como resultado de la crisis económica desatada por las medidas punitivas de distintas administraciones estadounidenses desde que en 2015 Barack Obama declaró a Venezuela como «un peligro» para la seguridad nacional desu nación.
Ahora, la deportación masiva de venezolanos a un tercer país se enmarca en una decisión sin precedentes del presidente estadounidense, Donald Trump, quien invocó la vetusta Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, que permite expulsar sin juicio previo a ciudadanos extranjeros considerados una amenaza durante tiempos de guerra.
