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NACIONES UNIDAS, septiembre 20.— Durante su participación en una reunión del Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas dedicada a Ucrania, que tuvo lugar este miércoles, el canciller ruso Serguei Lavrov denunció que crecen los riesgos de un conflicto global y para detenerlo, para dirigir los acontecimientos en una dirección pacífica, deben respetarse y aplicarse todas las disposiciones de la Carta de la ONU y no hacerlo de forma selectiva, sino en su totalidad e «incluyendo los principios de igualdad soberana de los Estados, la no injerencia en sus asuntos internos, el respeto a la integridad territorial y el derecho de los pueblos a la autodeterminación».
Según precisa Russia Today, Lavrov rememoró que al finalizar la Guerra Fría, los países occidentales encabezados por Estados Unidos se autoproclamaron capaces de decidir sobre el destino «de toda la humanidad» y todavía hoy se recurre a normas y principios estatutarios de manera selectiva, de acuerdo a sus necesidades geopolíticas egoístas, lo cual conduce al «deterioro de la estabilidad global, la exacerbación de las fuentes de tensión existentes y el fomento de nuevas.
Lavrov, quien llegó a Nueva York el martes para participar en el debate general del 78 período de sesiones de la Asamblea general de la ONU, culpó también a Occidente de lo que consideró «el colapso de Ucrania», pues se incita a la guerra civil y «desde el colapso de la URSS y la formación de los Estados independientes en su lugar, EE.UU. y sus aliados han interferido de manera grosera y abierta en los asuntos internos de Ucrania».
Asimismo, dijo que a Occidente no le interesa ni quiere mantener «un diálogo sincero» sobre el problema ucraniano», evita una conversación sustantiva basada en hechos y en el respeto a los requisitos de la Carta de la ONU y al parecer «no tiene argumentos para un diálogo honesto», mientras que el presidente Vladímir Putin no abandonará sus esfuerzos para un diálogo verdadero y civilizado.
Lavrov consideró, además, que hoy en día solo se escuchan las palabras invasión, agresión y anexión. Si la OTAN no hubiera rechazado durante años las propuestas de cooperación, se hubieran podido evitar muchos de los procesos negativos que llevaron a la actual crisis europea, pues durante décadas se han negado a escuchar a Rusia o la engañaban, mientras «se alimentaba un régimen nazi» y hoy todavía no dice «ni una palabra sobre las causas subyacentes del problema».
Para Serguei Lavrov, el apoyo de los países occidentales a Kiev después de los referendos en estas regiones viola el principio de autodeterminación de Crimea y Dombás y es una grave interferencia en sus asuntos internos; en tanto recordó las amenazas de de exterminar físicamente a los habitantes de estos territorios y que las exigencias de Zelenski no cuentan ni contarán con el apoyo de Moscú, porque incluyen la retirada completa de las Fuerzas Armadas rusas a las afueras de las fronteras de 1991 y el retorno a Ucrania del control de la llamada zona económica exclusiva en los mares Negro y Azov.
¿Quienes piden esto están familiarizados con las declaraciones de los líderes ucranianos sobre lo que van a hacer con los residentes en esa región? Pues hacia ellos se dirigen públicamente y a nivel oficial, repetidamente, las amenazas de exterminio jurídico o físico, se escuchan públicamente, repetidamente a nivel oficial, preguntó Lavrov en la reunión que -a su vez- fue calificada por el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia, como un «espectáculo».
Nebenzia consideró una violación del orden del trabajo del Consejo de Seguridad, el anuncio de que se dará la palabra a Zelenski antes que a otras delegaciones de los países miembros, algunas de las cuales están presididas por Jefes de Estado y de Gobierno, acusando al Consejo de pretender complacer a Ucrania. «Pareciera que para ella no existe ninguna ley escrita y que todo le está permitido», dijo.
Se prevé que el canciller ruso participe por estos días también en otros encuentros multilaterales relacionados al BRICS, la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva y el Grupo de amigos en Defensa de la Carta de la ONU y sostendrá conversaciones con el secretario general de la ONU, António Guterres.
Este conflicto ha centrado la atención de la mayor parte de las intervenciones de las dos jornadas de debate de alto que han tenido lugar en Naciones Unidas y a él han hecho referencia la mayor parte de los Jefes de Estado y de Gobierno, de delegaciones que han intervenido, por sus implicaciones para la paz regional y mundial, así como las implicaciones económicas que ya ha tenido en un contexto de crisis multidimensional.
De igual manera, la necesaria reforma del Consejo de Seguridad ha sido reconocida como un tema de interés mayoritario y así ha sido reconocido por el propio António Guterres, aunque Lavrov ha alertado que no debe «ampliarse en favor de los países occidentales, sino de los representantes de Asia, África y América Latina»
