El 21 de julio de 2016 se celebró en la capital cubana el tercer encuentro técnico sobre enfrentamiento al tráfico ilícito de drogas entre agencias de aplicación y cumplimiento de la ley de Cuba y los Estados Unidos.
En el marco de este evento se firmó un Arreglo para la Cooperación Operacional entre la República de Cuba y los Estados Unidos de América con el Objetivo de Enfrentar el tráfico ilícito de estupefacientes y otras sustancias psicotrópicas.
La reunión transcurrió en un clima de respeto y profesionalidad. Ambas partes coincidieron en la utilidad del encuentro y acordaron mantener las conversaciones en el futuro, se informó en la página web Cubaminrex.
Al respecto, Josefina Vidal, directora general de la Dirección General de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, publicó en su cuenta en Twitter: «Con adopción del Arreglo sobre enfrentamiento al narcotráfico, suman 11 los acuerdos firmados e/#Cuba y #EEUU en últimos 8 meses #CubaUS».
No fue este el único anuncio hecho por la alta funcionaria cubana, quien también destacó en otro tuit: «Julio 28-29 representantes de #Cuba y #EEUU sostendrán 2da. reunión informativa sobre compensaciones mutuas en #Washington #CubaUS».
Además, al comentar que son inobjetables las evidencias sobre la seguridad existente en los aeropuertos cubanos para los vuelos de Estados Unidos y del mundo, Josefina Vidal remite a un extenso trabajo publicado por el sitio cubadebate.cu donde se entrevista al jefe del Departamento de Seguridad de la Aviación del IACC, Armando Garbalosa, y en la cual se desmontan las acusaciones hechas por algunos congresistas norteamericanos sobre la inseguridad de nuestras instalaciones aeroportuarias.
En relación con este tema, en su cuenta @JosefinaVidalF, la diplomática señala que en julio, el Instituto de la Aviación Civil de Cuba (IACC) y la Administración de Seguridad del Transporte (TSA) de EE.UU. adoptaron un Arreglo para el despliegue de oficiales de seguridad a bordo de los vuelos charter.
En otros mensajes en las redes sociales, el grupo estadounidense Engage Cuba, que favorece la normalización de las relaciones entre ambos países y cabildea para ello ante los congresistas norteamericanos, destaca una información publicada la víspera en el lado opuesto del planeta, en el diario The Economic Times, de la India, bajo el título: «US embargo remains an obstacle in fully normalizing ties with Cuba», es decir, El bloqueo de EE.UU. se mantiene como obstáculo para la completa normalización de los vínculos con Cuba».
En esa utilización de las redes sociales para dar informaciones o comentarios sobre Cuba, Josefina Vidal también menciona en otro tuit un interesante material publicado por Shaun Casey, representante especial de Estados Unidos para la Religión y los Asuntos Globales en el Departamento de Estado de EE.UU.
La Religión en Cuba: diversa, vibrante y dinámica, es el comentario publicado el 19 de julio por Casey en el blog oficial del Departamento de Estado DipNote, donde afirma que si en julio de 2013 le hubieran preguntado sobre las comunidades religiosas en Cuba, solo hubiera hablado de las raíces católicas, pero que «entre el 6 y el 7 de julio de este año tuvo el gran privilegio de viajar a Cuba» y la «oportunidad de presenciar de primera mano lo vibrante, el dinamismo y diversidad de las comunidades religiosas del país».
Menciona que pudo reunirse con el liderazgo de la Iglesia Católica Cubana y con los representantes de un número de religiones en sus iglesias: bautistas, evangélicas, presbiterianos, mormones, judíos, musulmanes, budistas, asambleas de Dios, testigos de Jehová, santería y protestantes, y sus positivas respuestas a favor del proceso de normalización de relaciones de Estados Unidos y Cuba.
Hace ya un año que Washington y La Habana abrieron sus respectivas Embajadas, se mantienen negociaciones en variados temas de interés y beneficio común, lo que contribuye a fomentar una convivencia civilizada, pero el bloqueo permanece como un obstáculo serio a la normalización plena de las relaciones.
De ahí que el Gobierno cubano continúe insistiendo en que para que haya relaciones normales con los Estados Unidos será esencial que se levante el bloqueo, entre otras políticas heredadas de décadas de confrontación que no se corresponden con el contexto actual, en tanto afectan al pueblo cubano y laceran la soberanía del país.