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Después de tres días de suspensión de los diálogos de paz, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Co-lombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno de Juan Manuel Santos acordaron las condiciones para liberar, con la mayor brevedad posible, a un general de la Fuerza Militar colombiana, y a otros cuatro detenidos en manos de los rebeldes.
A través de un anuncio hecho por los representantes de los países garantes en el proceso de paz, Cuba y Noruega, se afirma que «las partes han acordado las condiciones necesarias para la liberación» del general Rubén Darío Alzate, la abogada Gloria Urrego y los militares Jorge Rodríguez, César Rivera y Jonathan Díaz.
Los diplomáticos Rodolfo Benítez (Cuba) y Rita Sandberg (Noruega) explicaron que las condiciones para la liberación de los cautivos incluyen «la participación de los propios garantes y del Comité Internacional de la Cruz Roja», y se corresponden con las acordadas para otros tipos de operaciones realizadas en el marco del proceso de paz.
En el documento leído, Cuba y Noruega agradecen la actitud constructiva del Gobierno de Colombia y de la insurgencia, reiteran su firme apoyo a los diálogos de paz y que continuarán contribuyendo en todo lo posible para lograr un acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera en la nación sudamericana.
El general Alzate, junto al cabo Jorge Rodríguez y la abogada al servicio del Ejército Gloria Urrego, fueron capturados el domingo último en una zona conflictiva del departamento de Chocó, en el oeste colombiano.
Los soldados César Rivera y Jonathan Díaz fueron tomados prisioneros por la insurgencia el pasado nueve de noviembre después de un combate en el departamento de Arauca.
Tras el incidente del domingo, el presidente Juan Manuel Santos decidió suspender temporalmente la mesa de diálogos hasta su liberación, que ahora se anuncia.
Declaraciones de la FARC-EP
Las próximas liberaciones se dan a conocer el mismo día en que se cumplen dos años de instalada la mesa de diálogos de La Habana y durante la jornada las FARC-EP hicieron un balance positivo de lo hasta ahora logrado.
El representante de la guerrilla Iván Márquez afirmó que en todo este tiempo ha habido avances importantes y ha permitido a las partes en la mesa «conocernos más, lo cual puede incidir para que los resultados de las conversaciones sean mas prácticos, viables. Nos entendemos mucho más que hace dos años».
La imposibilidad de lograr un alto al fuego bilateral y una participación más activa de la ciudadanía en las conversaciones de paz, figuraron como los principales obstáculos que —según la fuerza guerrillera— han encontrado en estos 24 meses de diálogo.
Con acuerdos parciales en más de la mitad de la agenda, avanzan las negociaciones que ya dejaron consensos en los asuntos de reforma rural, participación política de las FARC-EP, y drogas ilícitas, y discuten actualmente el tema de las víctimas de la confrontación social y armada.
